sábado, 4 de abril de 2009

TAMBIEN SON COSAS DE LA VIDA

La dieta infame, el kilo y medio de pastillas que me tomo a diario, los remedios caseros que me van aconsejando y que, con la mejor voluntad ingiero antes y después de cada comida y las panzadas de sofá impuestas por el reposo prescrito, me provocaron un desarreglo intestinal que se ha manifestado estos últimos días, sobretodo, en forma de gases nauseabundos que han sido el suplicio de todos los que me rodeaban, ya que por lo reiterados no habia forma de evitar que mas de una de aquellas apagadas explosiones incruentas, provocase el desasosiego de todas las pituitarias adyadcentes, que han venido saboreando con explendidez, por mi parte, todos los efluvios generados en el alambique de mi bendito cuerpo, tan bien dotado de materias primas despreciables, capaces de provocar un tan alto grado de putrefacción en tiempo record. Al principio agradecí la comprensión manifestada, pero después me dió mucha tristeza ver que aquellas sonrisitas condescendientes se iban apagando en unos rostros que acabaron por desmadejarse por completo, pareciendo que los enfermos eran los que me rodeaban y no yo que con un semblante sonrosado saboreaba, según mi estimación, la explendidez de aquellos vapores que a la fuerza debian tener un gran valor nutritivo dado el alto grado de calorias que generaban a lo largo de todo su recorrido intestinal y especialmente, al bañar en su salida, toda la zona que rodeaba mi ojete.
Esta noche, como suele ocurrir, me he dormido viendo la pelicula de la tele. Tambien como de costumbre, mi esposa me ha despertado para irnos a la cama y como por estas latitudes el calor humedo, de 35 a 38º, en las noches de calma chicha se hace insoportable, hemos tenido que poner en marcha el abanico del techo, como es habitual, para poder conciliar el sueño. Lo que ha sido diferente a los días anteriores es la forma en que se han escapado mis efluvios y las consecuencias extrañas que eso ha provocado, por lo que me he visto obligado a salir de la habitación y encerrarme en mi estudio, donde ahora me encuentro escribiendo esta entrada y tratando de evitar la estampida masiva de todos los demás habitantes de la casa, manteniendo de par en par el grandisimo ventanal que dá a la calle mientras, un magnifico ventilador, a toda velocidad, impide que se detenga el aire contaminado, evitando que pueda infiltrarse a través de las ranuras de la puerta como ocurriera la vez anterior.
Los sucesos han acontecido de la siguiente forma: "La verdad es que una vez acostados, nos hemos abrazado porque así solemos dormirnos. En la habitación contigua, de dos camas, duerme nuestra hija Valery y hoy precisamente estaba acompañada de dos de sus primas y en la que sigue se están acostando, provisionalmente, mis suegros dada mi convalecencia, por si en cualquier momento tuvieramos que salir urgentemente. Pues bien, como iba diciendo, al levantar la pierna para pasarla por encima de las de mi esposa en ese abrazo habitual, mi cuerpo, transformado en una autentica y gigantesca gaita ha ido soltando suavemente, pero de forma continuada, los efluvios retenidos durante toda mi siesta, emitiendo una nota que pasaba del grave mas "grave" a la trompetilla del mas agudo dependiendo de que subiese o bajase mi pierna y como quiera que esta situación se mantenia de forma invariable con una constancia que ha provocado mi hilaridad, cada golpe de risa provocaba un efecto de bombardeo nocturno muy parecido a los efectos especiales de esas peliculas antiguas en blanco y negro en las que desde el refugio se oian las descargas aereas de aquellos bombarderos de helice que ya pasaron a la historia. Las helices que no pasaron a la historia y sí estaban presentes y además iban haciendo su efecto, eran las del ventilador del techo, (aquí abanico), que iban empujando a través de las ranuras de la puerta esos efluvios que incluso para mi resultaban pestilentes y pronto inundaron las otras dependencias hasta el extremo de despertar primero a las pobres criaturas y despues a mis suegros, a los que oia culparse mutuamente de aquel olor atroz, mientras que mi esposa sumida en un profundo sueño, sin duda provocado por ese sopor continuo, que la habia dejado anestesiada, solamente daba señales de vida mediante suaves apretoncitos que me daba cada vez que se producia una nueva andanada. Acabados los gases, los retortijones me han llevado al inodoro donde he evacuado todo el veneno que llevaba dentro en tres incursiones urgentisimas que me han dejado en la gloria y ahora aprovechando que casi todo ha vuelto a la normalidad, voy a acostarme dejando constancia de este hecho que es tan real como una puesta de sol y tan edificante como la prueba de amor mas resignada de la convivencia, al margen de la intriga que la historia ha dejando en los propios personajes de la misma, ya que nadie, salvo ustedes y yo, sabe quien es el que mató al mayordomo, porque nunca podrán descubrir que el olor a difunto de sus cuartos pudiera proceder de una habitación que no era la suya y este es un secreto que espero no desvelen. A quien no le haya ocurrido o haya vivido en alguna ocasión algo similar que me arroje la primera piedra.

14 comentarios:

JuanRa Diablo dijo...

Ya decía yo que al abrir tu página por poco me caigo por el abismo por un efluvio perdido que hasta aquí ha llegado.
Me ha faltado saber si tenían la consistencia de la yema o la alegría de la yesca, si eran más bufa que gas o si el sonido era de cuesco, traca o mascletá.

Besos oxigenados para los afectados

anahija dijo...

Ni Ana Belèn ni yo sabìamos que un pedo daba para tanto.....Què Jartà (como dirìa ella) de reir.Desde la primera hasta la ùltima frase ha sido la manera màs divertida y poètica de describir al peo.Te veo jocoso y de buen humor...ya estoy contenta para todo el dìa.BUENÌIISIMO PAPÀ.Definitivamente Milena..te quiere.
PD: saludos juanpadre,me alegra saber que estas de tan buen humor,tus pedos llegan hasta mi con sonrisas incluidas.un besico(azafran)

Anónimo dijo...

Bendita sea Milena de Jesús!!! Bién tiene el cielo ganado...Encima te imagino a tí con esa risa incontrolable de quien disfruta de su puesta en marcha de esa cámara de gas...Hay que reconocer que a pesar de ser una entrada bastane repulsiva no está exenta de jovialidad y me ha hecho tanto arrugar la nariz como reir. Ten piedad de los que te rodean!!!!!!!! FRAN

Juan Manuel Rodríguez de Sousa dijo...

Lo mejor de todo, es que gracias a la torpeza de los informáticos este tipo de relatos no solemos disfrutarlos en toda su "plenitud" puesto que por mucho que describas el olor, lo mejor sería olerlo de primera mano. Lo cual se me ocurre tres alternativas: 1)Ir a tu casa,
2) Que me envies por correo los efluvios en una botella, 3)Tomarme una pepsicola y esperar a que haga efecto...
Lo más seguro es que me decida por la tres, pero por si acaso yo te mantengo informado.

Deberías corregir, después, cuando ya se te pase la pedorreta, el texto y mandarlo a un concurso, o guardarlo como oro en paño. Está muy bien, y se merece un maquillado.

Por otro lado... qué te iba a decir... ah, sí...
que se me ha venido una idea para un relatillo, gracias a ti, cuando lo termine tú vas a ser el primero en leerlo y por supuesto que llevará una dedicatoria especialmente para ti.

Un saludo, casi siempre es un placer leerte,
Juanma

Anónimo dijo...

Tomás:
No imaginas lo que me he reido con tu post,tu descripción quijotesca del pedo, su aroma y su elaboración en tu alambique han hecho que me parta de risa.

Iván Arribas dijo...

Bueno, bueno,...Cómo me he reído!!!.
Increíble descripción que eleva el mundo de las yemas a universos infinitos.

Txema Rico dijo...

Ay que ver lo que une un buen pedo, o una sarta de ellos...ja ja ja. A tí, Juan, que te gusta la poesía, ahí va eso:

Cuando me pongo a cagar
cago montones de mierda,
eso se llama cagar
y no esos cagones de mierda
que se ponen a cagar
y no cagan una mierda.
Eso es cagar?
eso...es mierda!!!

P.D. No sé de quien es original esta oda a la evacuación intestinal, pero a mi me la transmitió hace ya muchos años mi amigo Fermín.

pichiri dijo...

Querido Txema:
Como veo que te gusta cagar a lo
grande y no debemos desaprovechar esta ocasión tan propicia, me veo en la obligación de darte un consejo que, dada tu vena poética demostrada, te traslado en la siguiente cuarteta:
Para cagar con esmero
y no ensuciar el retrete
debes poner el ojete
enmedio del ajujero.

Ya lo decia yo en mi post "Al Pan Pan y al Vino Vino", que no hay nada mejor que llamar a las cosas por su nombre, sin remilgos ni amariconamientos. Máxime cuando otras palabras mas refinadas, además de ser imcompatibles con el buen sentido de la expresión a mi me resultan peor malsonantes "Deyecciones", Defecación de los excrementos y otras similares que le quitan vigor a un hecho tan natural que por costumbre repetimos a diario y si nos falta lo echamos de menos.
Y para terminar y dejar este asunto en la carpeta del olvido os voy a contar un chiste de mi queridisimo cuñado Tony q.e.p.d.:
Una solterona rica consiguió un novio palurdo que cada noche que la visitaba, a la misma hora, acostumbraba interrumpir el festejo diciendo "voy un momento a mear". Como quiera que los padres de la novia iban a dar una fiesta y la hora de la meada coincidia con la de la cena, con mucho tacto aleccionaron a su futuro yerno para que cuando se levantase de la mesa, en vez de decir me voy a mear dijera voy a hacer una necesidad, y tal fué el empeño que pusieron que el día señalado, efectivamente, el yerno, a la hora prevista, tal como los suegros temian se levantó y con mucha seriedad dijo, "perdonenme pero tengo que hacer una necesidad".
No habian terminado de exhalar el suspiro de alivio suegros y novia, por lo bien que habia quedado el novio, cuando este, volviendo sobre sus pasos regresó a la mesa y dijo a los comensales: "ah señoras y señores se me habia olvidado decir que al mismo tiempo voy a ver si puedo cagar",.

Anónimo dijo...

Esas aromas tuyas juan son las mas deliciosas que mi olfato a podido deleitar,como esos sonidos de una hermosa canción al comenzar eres lo mas lindo y hermoso.te quiero,te quiero y sin ti me muero t.q.m tu amor milena

JuanRa Diablo dijo...

Increíble el poder de convocatoria que tiene la mierda.
¡¡Ni que fuéramos moscas!!

Un saludo a Milena, a la que nunca había visto por aquí.

JuanRa Diablo dijo...

Anoche cenamos los de la Panxa Plena y esta entrada fue lo más comentado de la noche.
Alguien dijo que deberías abrir un bufet, pero con mucho ambipur!!

Jesi dijo...

mi tentación de entrar fue por el nombre de tu blog, asi descubrí que tenemos gustos parecidos, como el tango y el libro de Robinson crusoe, jaja...

Un beso enorme y un placer haber encontrado este blog.

Jesica

Jesi dijo...

Es verdad, esta no es la mejor entrada, pero de todas maneras te mando todas mis fuerzas para que tu situación pueda mejorar y disfrutes de los "abrazos" sin problema alguno.

Lo mejor para usted.

Jesica

pd: No soy una mujer, apenas una dolescente, jaja.

Anónimo dijo...

He vuelto (ya con su permiso) y no me resisto a decirle: muy buena la entrada y casi, casi mejor el comentario adjunto.
Estoy con usted, a las cosas hay que llamrlas por su nombre y si se dicen o cuentan con gracia, para que más.
Un saludo
Rasanliz