martes, 19 de enero de 2010

MI AMIGA IO

Yo tengo una amiga, a la que jamás he visto, que a veces piensa en mi. Tiene muchisimos problemas pero eso no impide que siempre encuentre un hueco para dedicarme parte de su escasisimo tiempo. No sé que me habrá visto para considerarme como alguien muy especial, pero es tal su convicción, según parece, que su opinión, cual si fuera un talismán, hace que me sienta como lo que siempre me hubiese gustado ser.
A veces me considero un impostor al dejar que piense así, al no descubrirle mis debilidades, mis dudas, mis miedos...
, pero es tan agradable sentirse admirado... Y lo gracioso es que cuando en un rasgo de sinceridad le confieso parte de mis miserias es cuando mas me admira y cuando mas patentes se hacen sus muestras de cariño. Yo la creo porque tambien siento lo mismo por ella, aunque en mi caso la admiración es obvia. No obstante, con razón o sin razón, al ser mutuo y recíproco nuestro afecto, es muy gratificante conocer nuestra mutua y sincera opinión sobre cualquiera de nuestros trabajos, a pesar de que en algunos casos pueda esta dar paso al mas enérgico e incruento de los debates.
A veces, nuestros silencios se prolongan mas de la cuenta y sentimos un vacio; es como si algo nos faltara y nos preocupa que esa ausencia pueda deberse a motivos indeseables. Cuando así es, nos sumimos en un desasosiego que nos angustia y desespera si las soluciónes no están a nuestro alcance, ya que no siendo así, ambos sabemos que podemos contar el uno con el otro y esa tranquilidad nos hace afrontar los problemas con mejor ánimo y a encontrar la forma de salir de ellos sin ningún desasosiego.
Mi amiga, ha hecho que descubra las cosas buenas que hay en mi y ha sabido valorar, incluso, las que crei despreciables, ayundandome a sentirme mejor conmigo mismo. Ha limado mi vanidad con su permanente humildad y mi sobérbia, haciendome pensar antes de emitir un juicio.
He podido comprobar que ella es así con todos sus amigos, que no tengo por qué creérme único beneficiario de su bondad ni de su ternura, pero se tambien que nadie podria robarmela. Aunque trataran de denigrarme ante sus ojos jamás lo permitiria. Por eso, consciente de que cualquiera que quiera acercarsele ha de encontrar en ella todo lo bueno que yo he podido hallar, quiero hacerle este humildisimo homenaje, sabiendo además, sin haber hecho ninguna consulta previa, que voy a contar con el beneplácito de todos cuantos la conocen, aunque la opinión de los demás sea para mí, tan solo, un punto y aparte.
Mi amiga, significa mucho para mi y se que a veces piensa tambien en la muerte. Por eso quiero decirle, PORQUE ESTOY CONVENCIDO DE ELLO, que si en un mundo avocado al fracaso, como este, cuenta con todos los parabienes de los que la conocen, en el Cielo, alguien mucho mas sábio que todos nosotros, no querra privarse de ella en las tertulias que, Convocará en su honor bajo el mas inmenso arbol del Paraiso, ese arbol que recibe la brisa del Mediterraneo y cuyas aguas en calma o embravecidas pueden apreciarse con todo su esplendor oteando el horizonte desde las primeras ramas que surjen de su inmenso tronco y a las que podrá llegar con el solo esfuerzo de batir suavemente sus alas.

6 comentarios:

JuanRa Diablo dijo...

A mi Io me enamoró a la primera. Me ha dejado en el blog los comentarios más cariñosos del mundo y me ha escrito correos con una cercanía tal que parecía que me contaba las cosas en persona y conociéndome de siempre.

Bendigo el día en el que me topé con su Mediterráneo (no recuerdo cómo llegué a él aunque sé que ella dirá que tenía que ser así) pues comenzó ahí una amistad imperecedera.
Muy ocupada debe estar sí, pues ni tiempo para el blog tiene y eso que no hacía más que traele cariño por parte de todos y llenarla de dicha, así que tendremos que seguir leyendo sus libros porque no os la perdáis como escritora: es buenísima.

Que bello texto le dedicas. A mí me ha emocionado así que imagino que a ella cuando pase por aquí (siempre termina pasando)la vas a hacer volar. Bueno, eso tampoco tiene mucho mérito, los ángeles saben volar.

Un abrazo papá y otro para nuestra amiga.

anahija dijo...

Io....sabiendo que tarde o temprano aparecerás por aquí,aprovecho para mandarte un abrazo con todo mi cariño,pues ya sabes que no solo tienes encandilado a Juan padre,sino que e éste le sigue el resto del clan.Me resulta curioso percibir en tí,sin haberte visto jamás,esa calma serena,ese nosequeesperoes...
Muy bonitas estas letras y muy merecidas también.
Cuídate Io,le haces falta a la humanidad.

Io dijo...

Mi queridisimo e invicto valedor:

Esto no se hace. Me paso por aquí para ver si hay algo nuevo, y me he puesto del color de la grana. Sólo te digo que estoy segura de que hubieses dado dinero por ver la cara que se me ha puesto:)

Entiendo que te cueste reconocer aquellas cosas que otros vemos y valoramos en tí al primer contacto. Lo entiendo porque en un mundo, tal y como dices, condenado al fracaso, un hombre como tú no cotiza. No son tiempos de nobleza, de bravura, de honestidad, de valor. No.

No todo el mundo está dispuesto a mostrarse tal y como es, a defender aquello en lo que cree aunque no sea politicamente correcto, porque enseguida verá su frente poblada por múltiples etiquetas. No todo el mundo expone abiertamente su humanidad, imperfecta como la de todos, porque a muchos no les gusta que les recuerden que, como humanos, somos siempre mejorables. Y, desde luego, no todo el mundo regala desinteresadamente la sabiduría, que a veces es incómoda y molesta porque nos pone un espejo delante cuando menos favorecidos estamos.

Tú y yo gozamos de lucidez, Juan. Tú, de la lucidez que te da la sabiduría, o viceversa, y yo de la lucidez necesaria para reconocerla. Aunque no fue esa sabiduría lo primero que ví en tí. Lo primero que ví fue la nobleza, en aquella entrada "Acuérdate de mí desde la Gloria", la nobleza y la grandeza de tu corazón. Ahí me enganchaste. Porque a mí no me vale un premio Nobel si resulta ser una mala persona.

Necesitaría de varias entradas para explicar todo lo que ví y sigo viendo en tí. Yo no soy especial, Juan, tan sólo, como digo, tengo la suerte de reconocer el oro entre la roca, y cualquiera que se molestase en leer media docena de tus escritos opinaría igual que yo. Por supuesto, sabes que no comulgo con algunas de las cosas que defiendes, pero admiro tu valor para hacerlo, y, como decía el genio Voltaire, "defendería con mi vida tu derecho a decirlo". Y, por supuesto, me apunto al debate, siempre, porque debatir contigo siempre es aprender, porque a veces me has obligado a estrujarme el cerebro para defender mi postura, porque, en cualquier caso, siempre es un lance "entre caballeros", y da gusto batirse con quien te mira de frente, sin temor a darle la espalda.

Sigo... que no me deja publicar un comentario tan extenso:)

Io dijo...

Tus hijos hablan de tí, Juan. Por sus obras les conoceréis. Si de algo me siento orgullosa es de mi hija, de quedarme embelesada contemplando a la gran mujer en que se ha convertido, de su corazón, su sabiduría y su poderosa intuición. Y me gusta regodearme pensando que algo habré tenido que ver yo. Y, en ese sentido, los hijos que tienes hablan de su padre, hablan por los codos y muy bien.

Tu amor por la naturaleza y por los animales habla de tí, Juan. Porque ese amor inexplicable que sentimos muchos hacia los seres vivos que no saben sumar ni cotizan a la seguridad social, es el producto de un profundo entendimiento y de grandes sentimientos.

Tu sentido del humor, que tantos buenos ratos me ha hecho pasar, también habla de tí. Porque saber reírse de uno mismo es la base para afrontar la vida.

Tu fe habla de tí, porque reconocer a un Ser Superior es tener la humildad de saberse inferior, y mantener la confianza permanente de estar en buenas manos no siempre es fácil, que a veces nos da la sensación de ser el juguete de un psicópata.

Yo lo único que puedo decir aquí es gracias, gracias a Dios por haberte puesto en mi camino, gracias por poder llamaros amigos, a tí y a tu prole, que si yo brillo por algo especial es por la gente de la que me rodeo, y si algo tengo de buena no me cuesta esfuerzo cuando doy con personas como vosotros.

Me reconozco en muchas de las cosas que dices, en esa inquietud cuando hay ausencia de noticias, en ese apoyo que encuentro cuando me siento decaer. Saber que estás, me da fuerza. Simplemente saberlo.

No sé si tendremos ocasión de darnos ese abrazo que, de tanto atravesar el Atlántico, ya tiene un poso de salitre. Confío en que sí. Mientras tanto, habrá que seguir alimentando el espíritu con estos sucedáneos, con abrazos virtuales que, a falta de tacto, van repletos de cariño.

Gracias por tus palabras, Juan. No las merezco. Ser amiga tuya merece un homenaje, pero un homenaje a la lucidez.

Un abrazo de amiga, de esos que dan calor.

Io dijo...

JuanRa, yo tambíén bendigo el día en que te conocí. Para mí eres un referente. Conocer tus andanzas es un soplo de aire fresco en un mundo que se decepciona a sí mismo dia a dia. Sí que echo de menos el blog, pero me ha dejado vuestro cariño. Efectivamente, yo diría eso, que tenía que ser así:) Yo creo en las etapas, en la función de cada página que escribimos en nuestra vida. Igual el blog era necesario para conocer a determinadas personas. Ahora el blog está abandonado. Pero esas personas permanecen.

Ana, ese cariño viaja en dos direcciones. Y esa calma me la da el conectar con almas como vosotros, que sabéis encontrarle a la vida toda la belleza que ofrece sólo para aquellos elegidos que saben dónde buscar. Tu dulzura es contagiosa y alimenta la mía. Tu serenidad es palpable y la mía se siente en su salsa cuando te lee.

Gracias por existir.

Sois maravillosos.

Un abrazo fuerte que os llegue.

pichiri dijo...

Queria darme el gusto de hacerte un pequeño homenaje y mira por donde, tu comentario sobre mí, supera con creces mi propósito respecto a ti. Ya sabia yo que no iba a salir mal parado en esta empresa. Yo sé que en estas circunstancias deberia, aunque solo fuera por modestia, desmentir algun que otro de los meritos que me atribuyes, pero como has estado comedida y seguramente por olvido involuntario te has dejado muchas flores en el tintero, no voy yo a venir ahora recortando por modestia los meritos mencionados a riesgo de que me crean y me vayan a considerar una persona vulgar. Quede bien claro que me almuerzo un gigante cada mañana y que me rinden pleitesia todas las organizaciones mas o menos ortodoxas desde el Atlantico hasta el Pacifico y ante esto, no te quedaba mas remedio que quedar deslumbrada.Lástima que por mis lares no goce de tan buena prensa.
Bendita seas Charo, me enorgullezco de ser tu amigo y me atreveria a decir que que tu ausencia de pareja se debe a que "eres mucha mujer" y no hay hombre que pueda estar a tu altura.