sábado, 29 de enero de 2011

EL PERSONAJE QUE NOS TOCÓ REPRESENTAR


No sé quién estará a cargo del casting, ni sé en qué se basarán a la hora de distribuir el reparto. Lo que sí sé es que a cada cual nos corresponde desempeñar un papel en la vida y que desde la inocencia de la niñez ya se vislumbra hasta dónde puede llegar nuestra ambición y se puede intuir nuestro carácter.

Pero OJO, no podemos sacar conclusiones a la ligera por las inocentes respuestas a nuestras inquisitivas preguntas, ya que en algunos casos puede existir un trasfondo que subyace solapado en la respuesta y que de no descubrirlo podría inducirnos a error.

Recuerdo aquel niño al que después de manifestar que cuando fuera mayor quería ser Guardia Municipal le preguntaron el por qué, y con toda la inocencia del mundo contestó: - Para poder quitarle las canicas a todos los niños que estén jugando en la calle.

NO VOY A PARARME A ANALIZAR TODO EL TRASFONDO QUE ENCIERRA ESTA ANÉCDOTA VERDADERA, YA QUE TENIENDO EN CUENTA LA PROFESION ELEGIDA PARA CONSEGUIR EL FIN ÚLTIMO, SOLAMENTE TENDREMOS QUE IR SUBIENDO EL GRADO EN LAS ESCALAS HASTA LLEGAR POR UN LADO A LOS MÁS GRANDES BOTINES Y POR EL OTRO A LOS MÁS ALTOS CARGOS.

Pero no es este el tema que me interesa, ni creo que le interese a nadie viendo cómo se repiten en el poder los mas aficionados a jugar con las canicas de los demás. Lo que me mueve en esta ocasión es tratar de comprender LOS OCULTOS DESIGNIOS QUE INFLUYEN EN LA HORA DEL REPARTO.

Como me suele ocurrir, más que nada por vivir en un mundo de ambigüedad tanto en las palabras como en las acciones, tengo que hacer de vez en cuando alguna aclaración para que no se me malinterprete, y COMO ACABO DE HABLAR DE "REPARTO" INMEDIATAMENTE DESPUÉS DE HABER HABLADO DE GRANDES BOTINES Y DE ALTOS CARGOS, QUIERO ACLARAR QUE EL REPARTO AL QUE EN ESTA OCASION ME ESTOY REFIRIENDO ES AL PAPEL QUE A CADA ACTOR LE CORREPONDE REPRESENTAR EN UNA DETERMINADA PELÍCULA Y CONCRETAMENTE EN ESTE CASO, EL PERSONAJE QUE NOS HA TOCADO REPRESENTAR EN NUESTRA VIDA".

Yo creo que ninguno llegamos con un pliego de recomendaciones bajo el brazo, ni el jefe del casting, CUANDO NACEMOS se deja influenciar por nuestro pedigrí, si es que donde corresponda ASIGNAR LAS CAPACIDADES se lleva un control de nuestra genealogía.

Y pienso que no influyen las recomendaciones porque de cualquier matrimonio puede nacer UN GENIO O UN RETRASADO SIN NINGUNA DISCRIMINACIÓN y en algunas familias los puede haber a pares, sin importar el que se encuentren en EL MÁS ALTO O EN EL MÁS BAJO de los peldaños del escalafón. Eso si, otra cosa será que alguno, a pesar de haber dado mas de una muestra de ser idiota pueda llegar a rey POR LA GRACIA DE DIOS, arrastrando como reina a una periodista divorciada, NO POR LA GRACIA DE DIOS SINO POR EL CAPRICHO DE UN PRÍNCIPE CONSENTIDO. QUE POR LO VISTO NO HA LLEGADO A COMPRENDER QUE LO ÚNICO QUE JUSTIFICA SU PRESENCIA COMO LO QUE ES, ES PRECISAMENTE CONSERVAR UN ANACRONISMO ABSURDO QUE PRECISAMENTE POR SER "ANACRONISMO" Y ADEMAS "ABSURDO" ES POR LO QUE SE MANTIENE. PONIENDO EN RIESGO LA INSTITUCIÓN CON SU INACEPTABLE REBELDIA QUE NO FUÉ MAS QUE EL PRINCIPIO DE SU FIN, POSTERGADO DE MOMENTO, POR INTERESES SOLAPADOS DE OTROS, CON FECHA DE CADUCIDAD Y NO POR RAZONES DE ESTADO TENIENDO EN CUENTA QUE EL ANACRONISMO QUE MANTENEMOS NOS CUESTA MAS DE OCHO MILLONES DE EUROS "A LA VISTA". TAMBIEN INFLUYÓ SIN DUDA LA SUERTE, YA QUE AL FINAL, AL MENOS, NO NOS VIMOS EN EL COMPROMISO DE REVERENCIAR NINGÚN PENDÓN NORUEGO,POR MUY AERODINAMICA QUE FUERA LA AZAFATA.

Pero en general, nuestros papeles van en consonancia con nuestras capacidades y éstas son intransferibles e irrenunciables, por lo que poca ha de ser la suerte de los bien dotados para que no SE LES ASIGNE EN EL REPARTO EL PAPEL QUE DESDE NIÑOS ELIGIERON Y QUE ADEMÁS LO INTERPRETEN DE FORMA MAGISTRAL.

Seria absurdo encasillar a los bondadosos con los místicos y a los mezquinos con los irreverentes por razones de origen, cuando en una misma familia si hay varios hijos cada uno es un mundo diferente. TENDRÁ QUE INTEGRARSE CADA CUAL EN EL REPARTO DESDE SU PUNTO DE ORIGEN Y EMPEZAR A INTERPRETAR SU PAPEL, CON UN CUIDADO Y ESCRUPULOSO ORDEN DE APARICIÓN.

AUNQUE SOMOS ACTORES NO DEBEMOS IMITAR A NADIE CUANDO ACTUEMOS, PORQUE NOS ESTAMOS REPRESENTANDO A NOSOTROS MISMOS. PUDIENDO IR EXTERIORIZANDO LOS CAMBIOS QUE REALMENTE SE VAN PRODUCIENDO EN NUESTRO FUERO INTERNO A LO LARGO DE LOS AÑOS SIN QUE ESOS CAMBIOS IMPLIQUEN EL QUE NO TENIAMOS BIEN APRENDIDO NUESTRO GUIÓN, SINO A QUE NUESTRA CAPACIDAD PUEDE INDUCIRNOS A CAMBIAR CIERTAS POSTURAS POR LAS RAZONES MAS CONTRADICTORIAS.

¿No han comprobado más de una vez que los hijos tienden a no hacer lo que hicieron sus padres? Ninguno de mis cuatro hijos fuma, posiblemente POR HABER SIDO YO UN TERRIBLE VICIOSO. Los padres de mi exesposa eran de izquierdas y ella siempre fue de derechas hasta la médula, al igual que a la inversa hayan tantos o más ejemplos que se podrían citar.

PERO LO QUE PARA MI ES MUY ALECCIONADOR Y ADEMÁS MUY SIGNIFICATIVO ES QUE CONOZCO A MUCHÍSIMOS COMUNISTAS QUE CUANDO LES SONRIÓ LA FORTUNA FUERON CAPITALISTAS A ULTRANZA Y NO CONOZCO A NINGUN CAPITALISTA QUE JAMÁS SE HAYA SENTIDO ATRAIDO POR EL COMUNISMO (Es una paradoja como otras tantas que no se nos ocurre analizar)

Tampoco creo que haya favoritismos a la hora de repartir las capacidades, porque un importante porcentaje de quienes alcanzaron un altísimo prestigio en cualquier loable actividad, procede de familias humildísimas, teniendo en muchos casos estas familias tantos méritos como los propios personajes, que sin duda alcanzaron tales honores, por la incansable ayuda que recibieron, sin más medios por parte de sus progenitores que el esfuerzo de su trabajo y las privaciones que se impusieron.

Lo que debe quedar claro es que a cada uno de nosotros, POR NUESTRA CAPACIDAD Y POR NUESTRA HONRADEZ nos corresponde un papel en esta vida Y QUE NI POR HUMILDAD DEBEMOS DEJAR DE RECLAMARLO, NI POR BONDAD NOS LO DEBEMOS DEJAR ARREBATAR, NO DEBIENDO JAMÁS "NADIE", APOYAR NI RECONOCER, EN CUALQUIERA DE LAS ESCALAS DEL FUNCIONARIADO, A LOS QUE CONSIGUIERON SUS PAPELES SIN LOS MÉRITOS REQUERIDOS O ARREBATANDOSELOS A SUS DIGNOS DESTINATARIOS, TANTO CUANDO ELLO SE DENUNCIE COMO CUANDO LO EVIDENCIEN LAS MUESTRAS DE SU INCAPACIDAD EN SOLVER O SU DESMEDIDO AFÁN HACIA CIERTAS CONCUPISCENCIAS QUE NUNCA TARDAN EN AFLORAR.

Y aquí es donde veo que falla el sistema, EN QUE NO OCUPE CADA CUAL EL PUESTO QUE LE CORRESPONDE "POR DIGNIDAD Y POR CAPACIDAD", lo que conlleva a que un cargo digno pueda encubrir UNA CUEVA DE TRAIDORES.

DEBERÍA EXISTIR UN MECANISMO INFALIBLE QUE CUANDO ESTO PUDIERA OCURRIR, ACTUASE CON TAL RAPIDEZ Y EFICACIA, QUE NO NOS DIESE TIEMPO SIQUIERA PARA PODERNOS PERCATAR DE QUE POR UNOS INSTANTES HABÍAMOS ESTADO A EXPENSAS DE CUALQUIER LADINO O GRUPO DE LADINOS.

BASTANTES PENALIDADES SUFRIMOS, PARA ADEMÁS TENER QUE SOPORTAR, CIERTA CANALLA, QUE DESEMPEÑA EN LA TRAGICOMEDIA DE NUESTRAS VIDAS PAPELES INMERECIDOS DE FORMA GROTESCA, PRETENDIENDO ADEMÁS, DE JUGAR, QUEDARSE DESPUÉS CON TODAS NUESTRAS CANICAS .

jueves, 27 de enero de 2011

LA CARTA

Curiosamente fue él quien tomó la iniciativa a pesar de todo el daño que ella le habia hecho. Llevaban muchos años sin ningún contacto y gracias a su "buena memoria", su tesón y alguna que otra colaboración consiguió su dirección.
Su carta, a rebosar de cariño porque siempre la amó, a pesar de que se viese obligado por pundonor y por hombría a apartarla de su vida, pero NI UN REPROCHE ENSUCIÓ EL PAPEL, SOLO PALABRAS EMOCIONADAS PARA RECORDAR LOS BUENOS MOMENTOS. Quizás ella me habrá buscado sin éxito, se decia, pero ahora, aquí estaba él para protegerla y alentarla como solo la mano amiga sabe hacer: "imprimiendo amor y calor en la caricia y profundo y sincero analisis en el consejo".

ES TAN POCO EN LO QUE VALORAMOS LO QUE HACEMOS POR AMOR QUE SUS ACCIONES NO PUEDEN SER SUSCEPTIBLES DE NINGÚN RENCOR, NI LA RESPUESTA DE NINGÚN AGRADECIMIENTO.

Cuando media el tiempo y la distancia, física y espiritualmente, los recuerdos negativos tienden a desvanecerse, aunque nunca queden borrados por completo, sin embargo, los momentos dichosos, a pesar de su posible insignificancia nos emocionan y se engrandecen por el solo hecho de habernos dado un minuto de felicidad.
En cambio en el presente que solo es el instante que media entre el pasado y nuestro futuro inmediato, inexorablemente se va desvaneciendo en su reiteración lo que nos atraia y nos daba felicidad, transformandose los místicos encuentros, en vulgares y anodinos contactos que nos incitan a repudiar lo que tenemos para volver a sentirnos atraidos por lo nuevo, por lo bello, por lo desconocido y en suma, por todo lo que nos atrajo en el ciclo anterior que ya ha perdido el aliciente de su atractivo. Ese aliciente que ahora creemos encontrar en lo que se nos presenta como novedoso, extraño y prometedor. EL TIEMPO Y LA DISTANCIA ENGRANDECEN Y SUBLIMIZAN LOS BUENOS RECUERDOS Y TIENDEN A DESVANECER, INCLUSO A BORRAR LOS QUE NOS HICIERON SUFRIR.

EN CAMBIO, EL PRESENTE, DESTRUYE Y EMPEQUEÑECE LO SUBLIME, LLEGANDO A HACERLO ABORRECIBLE EN SU REITERACIÓN Y FAVORECE Y EXPANDE HASTA HACERLAS INSOPORTABLES, LAS SUTILEZAS QUE JAMÁS PENSAMOS QUE NOS PUDIERAN INQUIETAR. LLEGANDO A TRANSFORMARLAS EN GIGANTES QUE INTIMIDAN, APRISIONAN Y COHARTAN NUESTRA LIBERTAD Y NUESTRA DICHA. POR ESO CON LA EDAD, SI LOS AÑOS HAN ESTADO CUAJADOS DE EXPERIENCIAS, CUALQUIER SUSPICACIA ESTÁ JUSTIFICADA, PERO A PESAR DE ELLAS SE REHUYE EL CAMBIO, POR SER UN ERROR BUSCAR UNA UTOPIA, CUANDO SE SABE QUE LOS CICLOS SON IRREMISIBLES E INEXORABLES.

EL ERA UN HOMBRE MUY RICO EN EXPERIENCIA y siempre tuvo una conciencia muy estricta en cuanto a su comportamiento con todos los demás, hasta el extremo de considerar, que si acudía a felicitar a una persona en su cumpleaños, o a dar un pésame, por hacer alusión a una situación completamente opuesta, podía importunar a quien teóricamente debiera halagar. Por eso inventaba razones para justificar sus ausencias, aunque estas pudiesen rayar en lo absurdo, tales como el que el homenajeado se creyese obligado a obsequiarle con algún refrigerio, lo cual seria sin duda una molestia para él; que pudiera sentirse indispuesto y tuviera que aguantarlo por cortesia; o sencillamente que no celebrase este evento y fuera él solo el que viniera a recordárle que ya era un año mas viejo. Mientras que en el otro supuesto, podría ser que su pésame, al recordar al ser querido, aún tan presente, pudiera propiciar las lágrimas de nuevo a unos ojos ya cansados de derramarlas, cuando lo único que deseaban era un poco de soledad, de paz y de silencio.

Después, por no asistir, se le recriminaria su falta de consideración, cuando se le podía calificar como la consideración personificada, pero ¿para qué iba a dar explicaciones que tan sólo podrían empeorar la situación?.

El caso es que a pesar de rehuir cualquier convencionalismo y querer hacer las cosas cuando le nacían, siempre surgia una lucha en su fuero interno por las cosas mas intrascendentes , eso sí, solamente cuando era él, el que se obligaba, hasta extremos tan absurdos como el que sigue:

"Es normal que haya un orden al mantener correspondencia "escribo-contestan, me escriben-contesto" y así es como está establecido". Su carácter no soportaba tener que esperar cuando tenía algo que decir, mientras por otra parte sabia que ALTERAR LAS NORMAS PUDIERA HACER PENSAR QUE ALGO MALO HABIA OCURRIDO. Esto solo cabía en una conciencia tan estricta como la suya, pero así la tenia hasta el extremo de plantearse el dilema de que si infrinjía las normas tal como deseaba, podía provocar en los demás algún malestar que por supuesto no deseaba, POR LO QUE TENIA QUE SOMETERSE A LOS CONVENCIONALISMOS POR AMOR, CUANDO PRECISAMENTE ERA POR AMOR POR LO QUE SIEMPRE QUISO IGNORAR LOS CONVENCIONALISMOS.
ESA SITUACIÓN ME IMAGINO QUE SOMOS MUCHOS LOS QUE LA HEMOS EXPERIMENTADO, SIN HABER LLEGADO NUNCA A ANALIZARLA, LO QUE ME HACE PENSAR QUE NUESTRO AMIGO NO ERA TAN DISTINTO A NOSOTROS.

En este estado de cosas, lo que se deseaba hacer, quedaba sometido a lo que imponía la norma no escrita que todos respetamos, a veces como muestra de amor, como ocurria con nuestro amigo. Habiendose dado algunos casos, que no tienen nada que ver con el, en que las pausas entre carta y contestación fueron tan largas que cuando se recibió la respuesta ya era casi obsoleto lo que se dijo en la carta que originó la respuesta y a veces la respuesta misma.

"EL SENTIMIENTO ES ÚNICO". LO QUE VARIAN SON LAS MIL DIFERENTES FORMAS EN QUE PUEDE MANIFESTARSE, PERO COMO TAMBIEN SON MIL LAS DIFERENTES FORMAS DE SER CADA CUAL, NI ES REPROCHABLE LA ACTITUD DEL IMPACIENTE LOCUAZ NI LA DEL PACIENZUDO TACITURNO.

COMO TAMPOCO ES REPROCHABLE LA IMPACIENCIA CUANDO APARECE COMO UNA NOVEDAD ALGUNA DE ESAS MIL FORMAS DE EXPRESAR NUESTRO SENTIMIENTO Y LA ESPERA PARA TRASLADARLA A NUESTO SER AMADO NOS PARECE UNA ETERNIDAD.

Cuantos habrán que esperan una carta, todavia sin motivo de alarma, o que ya la recibieron, como nuestro amigo, que se sintió feliz al saber tambien feliz a aquella a la que quiso, prefiriendo dejar las cosas como estaban porque sabia que al trasladar al presente lo aún tan lejano , "ese minuto de felicidad que tanto le llenaba viniendo del pasado", se quedaria en lo que fué en su presente, mientras que los largos y tristes recuerdos casi desvanecidos, volverian al presente con toda nitidez, tan tristes e insoportables como fueron en el presente de aquel pasado que irremisiblemente habria que revivir.

DE ALGO SIRVIERON LAS EXPERIENCIAS VIVIDAS, PORQUE EN EL CASO DE NUESTRO AMIGO ES DONDE VERDADERAMENTE MEJOR SE APLICA ESE CONCEPTO TOTALMENTE DIFUNDIDO DE QUE LO QUE IMPORTA ES LO QUE SUCEDA A PARTIR DE...Y EN ESTE CASO, NUESTRO AMIGO, EN VERDAD, SOLO TUVO EN CUENTA LO REPROCHABLE QUE SURGIÓ PRECISAMENTE "A PARTIR DE ESE DE"

Pero los que realmente me dan pena, son los que ya han sobrepasado los tiempos de espera razonables, estando aún ahí, pendientes de una carta, de la que depende su felicidad, que ya todos sabemos que nunca llegará.

DIOS PROTEJA A LOS QUE PERDIERON YA SU ULTIMA ESPERANZA Y SE COMPADEZCA DE LOS QUE CON ESA ILUSIÓN INEXTINGUIBLE AÚN ACUDEN DIA A DIA PARA BUSCAR SU CARTA, AUNQUE SIEMPRE ENCUENTREN VACIO SU BUZÓN.

miércoles, 26 de enero de 2011

ANÉCDOTAS AMERICANAS 4


El destino tiene sus caminos trazados y siempre hay algo que nos empuja hacia ellos.
El día que decidí abandonar Isla Margarita (Venezuela) para marcharme a Colombia, influyeron en mí dos cosas que me empujaron con fuerza irrefrenable:
1ª) Tenía la corazonada de que mi verdadero camino no estaba en Venezuela y recordaba con cariño a una chica que había conocido en Colombia en mi viaje del año 2.OO4 y de la que tenía muy gratos recuerdos. Esta chica, llamada Gloriela, estaba en los últimos años de su carrera de Derecho cuando la conocí. Era vecina de la Sra. Lidia en cuya casa estuvimos alojados en el viaje al que hago referencia. Era culta y bonita, ojitos achinados y un tipito de ensueño. Había habido entre nosotros buenas vibraciones, sintiéndonos atraídos mutuamente y me apetecía muchísimo volver a verla.
2ª) Yonheida me había llamado arrepentida de su comportamiento, reconociendo su error y convencida de que me quería con toda su alma. Yo no me dejé impresionar, pero ambos sabíamos que si acudía a mí de nuevo la perdonaría. Por eso, cuando a pesar de mi negativa me aseguró que esa misma mañana iba a viajar a Porlamar desde Valencia, a unas 10 horas de viaje, comprendí que la única forma de evitar el complicarme la vida con una mujer a la que le había perdido la confianza era marcharme de allí a cualquier destino, así que definitivamente me decidí por Colombia.

Sin pensarlo más, preparé la maleta, cogí un taxi, me dirigí al puerto y me embarqué en el primer ferry que salía dos horas mas tarde camino de Puerto La Cruz (Venezuela). De allí iría en autobús a Caracas y de allí en avión a Bogotá para después hacer trasbordo para Barranquilla (26 horas de viaje)

El Ferry era un barco muy hermoso y cómodo y el recorrido hasta Puerto La Cruz duraba algo más de siete horas.
Estando tomando un tentempie
, faltando una hora aproximadamente para que el Ferry llegara a Puerto La Cruz, sonó mi celular y apareció en la pantalla el número de Yoneida. Era muy probable que ya hubiese llegado a Porlamar y estuviese tratando de localizarme. La sorpresa fue inquietante ya que quien me llamaba era el energúmeno de su marido que me saludo con estas palabras:

"Aunque te escondas debajo de las piedras te voy a encontrar y te voy a meter la lengua por la raja que voy a hacerte debajo del cuello, rompe parejas!!"

No sé de que modo había descubierto que su mujer me iba a venir a buscar y lo único que sí sabía era que quien me estaba buscando no era sino el cabronazo de su marido que venia a matarme. Me llamó más de 20 veces en lo poco que quedaba para desembarcar. Yo rechazaba las llamadas pero a veces trataba de hacerlo entrar en razón, cosa que lo irritaba más, por lo que definitivamente apagué el celular. ¡Qué bendita decisión la mía de salir de Porlamar de incógnito!

Quizás pueda resultar cómica esta situación, pero podía haber terminado trágicamente.

Me enteré de todo lo ocurrido en Caracas poco antes de coger el avión para Bogotá. Conecté el celular en la sala de espera, que como sabéis había apagado en el Ferry, y casi de inmediato recibí llamada de Yoneida que me contó a grandes rasgos lo ocurrido como sigue tambien a grandes rasgos:

Alguien, parece ser de su propia familia, avisó a su marido de que su mujer estaba preparando la maleta para irse a Porlamar a reunirse con un tipo español que la estaba esperando y muy contrariamente a la forma en que solía actuar aquel sinverguenza, acudió a la casa muy amablemente y le dijo que comprendía que quisiera marcharse pero que le preocupaba que yo pudiera hacerle daño. Ella sorprendida, pero creyendo que era una oportunidad de oro para que ya no nos molestase le habló de mí todo lo mejor que supo, hasta que lograda la información que pretendiera le dijo que el viaje a Porlamar lo iba a hacer él y que iba a traerle de regalo MIS COJONES.

Le arrebató su celular en cuya agenda aparecia mi número, la ató y la encerró en uno de los cuartos de la casa no sin antes darle un puñetazo que la dejó inconsciente. Había conseguido soltarse después de varias horas y logró escapar pero no pudo llamarme porque aquel bestia, le había robado el celular y la había dejado sin cinco céntimos, agravándose la situación cuando tras conseguir el medio para comunicarse tampoco lo había logrado porque mi celular estaba apagado, sin conseguir hacerlo hasta que lo conecté.

Como ella no sabía que yo estaba a punto de embarcar camino de Bogotá y pensaba que aún estaria en Porlamar, me propuso que cogiera el Ferry y que nos encontrásemos en Puerto La Cruz para perdernos después donde nadie nos pudiera encontrar, pero yo le mentí diciendole que ya estaba camino de regreso a España y que ya no iba a volver. Conservo el nº de teléfono de Yoneida pero nunca tuve el valor de llamarla temiendo enterarme de algo desagradable.

CONTINUARÁ....

martes, 25 de enero de 2011

SOLO A TITULO INFORMATIVO


Cuando uno ha vivido muchos años, puede dar fe de la cantidad de manipulaciones a las que se nos ha ido sometiendo, valiéndose de nuestra ignorancia, nuestra impotencia y nuestra buena fe.

Yo recuerdo perfectamente el anuncio de un dentífrico - SIGNAL concrétamente - que en su propaganda, como muestra de su extraordinaria calidad decía: "CON HEXACLOROFENO".
Después de muchos años de usar ese producto de tan extaordinaria calidad según los estudiosos de aquel momento, vinieron otros a denunciar que el hexaclorofeno era una de las sustancias cancerígenas por excelencia, lo que supuso la retirada del mercado de todos los productos que llevaban tal sustancia y, como es lógico, del dentífrico en cuestión, cuya marca no me atrevo a asegurar si también desapareció o sólo dió un bajón en las preferencias de los usuarios.

PERO ¿QUÉ OCURRIÓ CON LOS "ESTUDIOSOS" QUE HABIAN PUESTO POR LAS NUBES LAS EXCELENCIAS DE TAL PRODUCTO? ¿O ES QUE RESULTÓ SER QUE DE INMEDIATO SE COMPROBÓ QUE ERA INOCUO Y SIN IMPORTAR SE CARGARON CON ESTA MARTINGALA UNA MARCA QUE EMPEZABA A HACER DAÑO A OTRAS MÁS PODEROSAS?

Siempre, incluso en las recomendaciones médicas, se afirmó que el pescado azul no era recomendable y desde luego se desterró de la dieta de cualquier persona que tuviese alguna dolencia, siendo un signo de distinción, INCLUSO EN LOS QUE GOZABAN DE BUENA SALUD, el consumir pescado blanco. Desde ya hace muchos años, quizás coincidencidiendo con las bajas capturas de este tipo de pescado y la superabundancia del no aconsejado, vino a resultar, SEGÚN EL INFORME DE ESOS ESTUDIOSOS DE PACOTILLA QUE SIEMPRE APARECEN EN EL MOMENTO MAS O MENOS OPORTUNO SEGÚN CONVENGA, que el pescado verdaderamente recomendable era el azul.

Lo grave es que, a ciencia cierta, YA NINGUNO SABEMOS si nuestra dieta, nuestros medicamentos, o nuestros jabones o perfumes, pueden mañana ser catalogados como dañinos, o incluso si son la causa de nuestras últimas dolencias. Ni tenemos certeza de si el método de enseñanza que se está aplicando a nuestros hijos es el adecuado y así todo, en cualquier aspecto de nuestra vida, que sin duda vendrá a concluir cuando nos demos cuenta de que no hemos sabido vivirla o la hemos arruinado totalmente dejandonos llevat por los equivocos de tan "inutil" gente.

Los cigarrillos que antes nos metían por las narices ahora están en desgracia, mientras que otros productos tan dañinos o más siguen conservando todos sus privilegios, incluso hay lugares en los que se puede fumar marihuana en la barra de un bar mientras que si el de la mesa de al lado enciende un cigarrillo de tabaco, el encargado del bar tiene la obligación de exigirle que lo apague, sacarlo del establecimiento, o llamar a la policía,según convenga, con todas las consecuencias que de ello se puedan derivar, siempre con cargo, claro está, del infractor de una ley que a mí particularmente me parece injusta, a pesar de que no fumo.

Y no estoy diciendo ninguna barbaridad en lo que se refiere a la veracidad de los hechos.

Según denuncias que parecen tener mucho fundamento, organizaciones de un préstigio que debía ser inmaculado, tales como la Organización Mundial de la Salud y toda la cadena que a ella se adhiere, parece ya demostrado que han venido actuando con más virulencia que cualquier organización mafiosa, según se desprende de las denuncias que se le vienen haciendo, ya desde hace años, por distintos medios, incluso a través del cine, que ha resultado ser una magnifica fuente de información y de denuncia.

Lo curioso es que ante ciertos gigantes, las administraciones guardan un silencio que a criterio de los denunciantes no es más que la prueba de su implicación de una forma u otra en esos tinglados donde se manejan cifras escalofriantes.

Siendo nosotros los conejillos de indias y las víctimas propiciatorias en cantidad de casos, aunque en la mayoría ha sido el continente africano el que se ha llevado tan fatídico prémio, quedando siempre encubiertos tales desmanes, por la eficacia del papel moneda y en virtud de intereses superiores.

¿Recuerdan ustedes el ACEITE DE COLZA, DE CUYO ENIGMA NADIE SUPO NADA Y QUE LAS PERSONAS A LAS QUE INVOLUCRARON MURIERON DE FORMA MISTERIOSA? ¿SABÍAN QUE A LOS AFECTADOS SE LES INDEMNIZÓ POR EL GOBIERNO PARA QUE NO PERSISTIERAN EN SUS DENUNCIAS Y EN SUS ALBOROTOS?

Yo siempre he tenido un sexto sentido que me ha interrogado a mí mismo en muchos aspectos de la vida, teniendo que silenciar mis respuestas porque tambien tengo una experiencia que me dice que de ciertas cosas no es bueno hablar. Demasiado extrovertido soy ya insinuándolas o poniéndolas sobre el tapete para que cada cual opine en su fuero interno.

Ahora ya depende de que ustedes den alas a su imaginación para que vuele hacia algunos acontecimientos de nuestro pasado casi inmediato. Quizás, tras sobrevolar sin animosidad pero buscando respuesta a las muchas incógnitas, aplicando simplemente la lógica, pueda llegarse a conclusiones que no a mí, pero sí a otros, podrían sorprender.

lunes, 24 de enero de 2011

UNA DE LAS INCONTABLES MENTIRIJILLAS DE LA VIDA.

Ayer vi, por uno de tantos canales de televisión, una película que probablemente fue filmada cuando todavía yo no había hecho mi Primera Comunión y que habré visto a lo largo de mi vida no sé cuantas veces.
No voy a dar muchos detalles técnicos sobre ella porque mis conocimientos sobre la materia son bastante limitados y desde el prisma que quiero tratar el asunto, son intrascendentes. Sí diré que su título era Fort Apache y que en el reparto no faltaba ninguno de los actores entrañables que para este tipo de pelicula se pudiese desear.

El tema de la película, no es otro que la reinserción de una importante mesnada de indios a "LAS RESERVAS", pero a mi criterio, sirve también de base para plantear algunos controvertidos conceptos, sólo discutibles desde fuera del filme, ya que desde dentro, aunque hay un amago de intento, es obvio que se habrán que cumplir las órdenes de quien en definitiva ha de tomar la última decisión y al ser ésta de carácter militar prevalecerá la obediencia debida, a los particularísimos criterios, al margen de las consecuencias deplorables que de seguro recaerían sobre quien no obedeciera.
Quizás no sea más que una confusión, pero el mundo esta lleno de injusticias cometidas en aras del honor cuando ciertos actos no han sido más que un gesto de soberbia.

Y en el caso de los indios no quepa la menor duda de que fue la soberbia la que siempre estuvo presente en los actos de los colonizadores, refiriéndome a ellos en función de la administración que los representaba, que en todos los pactos, que en definitiva no cumplió, no hizo mas que decidir siempre EN SU PROPIO BENEFICIO, no dándoles la mejor tajada a los suyos, sino repartiendo entre los suyos todas las tajadas.

¿Qué fue de las inmensas praderas mas que un recuerdo para aquellos que siempre vivieron en ellas? y ¿cuál el destino de aquellos?

Las tierras fértiles de prados y sembraduras, donde los colonos criaron sus huertas y sus animales, no eran más que aquellas que alimentaron por siglos a los que allí vivian, que fueron obligados a instalarse en las montañas con el acuerdo de que allí jamás se les molestaría, malviviendo con escasísimos recursos y despojados de todo lo que da grandeza a un pueblo, que no es más que el creer que aún tiene un porvenir de prosperidad.

Pero se oyó el grito de Oro en las montañas y la avaricia de todos se olvidó de nuevo de los indios y además los hizo insoportables porque molestaban para explotar a sus anchas esa gran riqueza, empujándolos hacia los pantanos a donde nadie queria acudir y donde de forma definitiva se les aseguró que ya no se les molestaria, teniendo esta vez que ambientarse en lo que eran parajes inhóspitos y subsistir de la caza y de la pesca, cambiando las pieles por aquello que por sí mismos no se podian abstecer.
Desecaron algunas zonas donde sembraron sus cereales y donde instalaron sus poblados y pronto pudieron criar sus propios animales domésticos, pero como la inercia de la avaricia es algo imparable y no podían quedar en manos de "salvajes", los magnificos yacimientos de petróleo que mira por donde fueron a localizarse precisamente en los pantanos, SIN IMPORTARLES VOLVER A ROMPER UNA VEZ MAS SUS TRATADOS, de nuevo fueron a tocarles las narices a los pobres indios, para que se largasen a otro sitio donde no pudiesen estorbar.

Pero como ya no había ningún otro sitio donde mandarlos, ingeniaron UNOS CAMPOS DE EXTERMINIO A LOS QUE LLAMARON RESERVAS, donde su población diezmadísima HABRÍA SUCUMBIDO, de no ser por el seguimiento que desde ya hace algunos años se les viene prestando, gracias al esfuerzo de unos pocos y al interés de otros tantos.

Lo que me hace gracia es que los colonizadores de Estados Unidos, como los de Australia con quienes se dan la mano PORQUE SON PAISANOS NO SÓLO EN CUANTO AL ORIGEN SINO EN CUANTO AL TRATO DISPENSADO A LOS INDÍGENAS DE ESTOS LUGARES COLONIZADOS, son en su inmensa mayoria de origen anglosajón, es decir, provinientes de pueblos cultísimos, según se han empeñado en hacer ver a todo el mundo LOS HIJOS DE LA GRAN BRETAÑA y además, ESO SI, DEMOCRATÍSIMOS, lo que me hace pensar que su modo de pensar coincide con su modo de hacer tambien en la mayoría. Lo que como consecuencia demuestra la clase de personas que son cuando por su interés y sin ningún respeto, han incumplido sus tratados cuando les ha parecido, han diezmado de forma inmisericorde a la totalidad de las razas indias de lo que hoy son los Estados Unidos de América y han exterminado practicamente a todos los habitantes que plácidamente vivian en Australia antes de su llegada, siendo habitual la práctica de la caza del zorro con ellos a falta del pequeño y astuto animal, quedando en el año 1.976, fecha de la públicación de la Enciclopedia Bruguera que es de donde tomo el dato, solamente CINCUENTA MIL SUPERVIVIENTES DE TODO UN CONTINENTE con una extensión de casi OCHO MILLONES DE KILÓMETROS CUADRADOS en lo que a Australia se refiere.

TENIENDO ADEMAS LA DESFACHATEZ Y LA OSADIA DE CRITICAR EL PASO DE LOS ESPAÑOLES POR LAS TIERRAS AMERICANAS, HACIENDO PROSELITISMO EN NUESTRA CONTRA, ARRASTRANDO INCLUSO A ALGUNOS MEMOS ESPAÑOLES, FOMENTANDO Y ADORNANDO EN LO POSIBLE LAS CÍNICAS Y ESPERPÉNTICAS CALUMNIAS DE LA LEYENDA NEGRA.

Pero como no sería honesto por mi parte terminar este comentario sin decir toda la verdad, me queda la dicha de haber comprobado que de un tiempo a esta parte, los malos en las peliculas de indios, son los que siempre lo fueron, aunque por tanto tiempo pretendieran inducirnos a error y estoy seguro de que tras esta muestra de humildad, todos, verdugos y víctimas, en su fuero interno, deben sentirse muchísimo mejor.

Y es que aunque sólo sea en raras ocasiones "LA HISTORIA PONE A CADA CUAL EN EL LUGAR QUE SE MERECE"

viernes, 21 de enero de 2011

PARA PODER CRITICAR HAY QUE DAR ALTERNATIVAS - 3ª PARTE

Vuelvo a incidir, sobre las garantías de todos los que intervienen en el proceso de fabricación en cuanto al cobro de las materias primas que aporten al industrial hasta la total terminación del producto.

Como cada proveedor, puede a la vez tener otros proveedores, ya que para la fabricación de una determinada materia prima, pueden precisarse otras materias primas que deberán ser transformadas en la que definitivamente vaya a aplicarse al producto final, EN NUESTRO EJEMPLO, EL ZAPATO.
En cada pedido deberá haber un apartado en el que se mencione con todo lujo de detalles la memoria de todos los productos que se van a emplear en el proceso de fabricación, indicando la calidad y el precio de los mismos según el baremo que esté en uso en los mercados para este tipo de productos, con copia de la factura proforma ESTANDARIZADA, facilitada al fabricante como garantía de que no va a haber ninguna modificación de precios durante el período comprendido desde el inicio hasta el término de la transacción que se haya convenido, plazo éste que figurará en la memoria del pedido.
También habrá un plazo establecido por la Administración, que señalará las fechas límites en que deberán estar hechos los cargos de los proveedores en la cuenta del fabricante, teniendo cada proveedor que hacer su cargo a la cuenta de quien le efectuó el pedido, pero siempre con referencia a su destino final que deberá conocer, de forma que aunque cada proveedor efectúe el cargo a la cuenta del destinatario de su mercancía, cada cargo será un eslabón que se entrelaza con el siguiente, haciendo que la totalidad de ellos forme una cadena cuyo importe total, directa o indirectamente habrá sido atendido a cada uno en su proporción, a expensas del importe del pedido que en su día se abonó al fabricante, descontado del saldo de la Clasificación Comercial del Comerciante al detall, que en definitiva será el que reciba el producto totalmente terminado y listo para la venta.

Como quiera que en todo este proceso el destino del dinero abonado a la cuenta del Industrial sólo se utilizará para pagar los pedidos de materias primas referenciados en el pedido PRINCIPAL, (cuyo abono se hará además, a la vista y contra entrega de la correspondiente factura y copia de pedido del fabricante y la confirmación de su recepción) no se puede temer ningún mal uso de los importes abonados, máxime cuando solamente quedará en la cuenta de los beneficiarios, incluído el fabricante, el beneficio neto de la operación y de éste SOLAMENTE PODRÁN DISPONER SI LO PRECISARAN una vez hecha la entrega de la mercancía a satisfacción del comerciante que le hizo el pedido LISTA PARA SU VENTA.

Ejemplo parcial: El matadero vende a la Tenería y ésta al Almacén de Curtidos. El cargo del Almacén de Curtidos repercutirá sobre la cuenta del Fabricante, mientras que el de la Tenería lo hará sobre el Almacén de Curtidos, y el del Matadero lo hará sobre la Tenería. PERO TODOS SERÁN SATISFECHOS ORIGINALMENTE POR LA CUENTA DEL FABRICANTE A LA QUE QUE SE ABONÓ EL IMPORTE DE LA TRANSACCIÓN QUE ORIGINA ESTA CADENA.

VUELVO A INSISTIR EN QUE AUNQUE PAREZCA COMPLICADO ES TAN SENCILLO COMO PONER EN MARCHA UN AUTOMÓVIl Y ADEMÁS EL CONTROL QUE SE APLICA PARA SU BUEN FUNCIONAMIENTO VUELVE A TRAERNOS UNA SORPRESA AGRADABLE, Y ES QUE NADIE PODRÁ DEFRAUDAR NI UN SOLO CÉNTIMO EN CUALQUIER OPERACIÓN QUE SE REALICE, PUESTO QUE AL DECLARAR UN BENEFICIO EN FUNCIÓN AL PRECIO DE VENTA Y DE LOS GASTOS REALIZADOS, SI SE MINIMIZARA EL BENEFICIO TENDRÍA QUE SER A COSTA DE AUMENTAR LOS GASTOS POR LAS MATERIAS Y ESTO IMPLICARÍA A SU O SUS PROVEEDORES EN UNA FALSEDAD QUE DE UNA U OTRA FORMA LE O LES PERJUDICARÍA, Y POR ELLO ES IMPOSIBLE REALIZAR LA MÁS MÍNIMA DEFRAUDACIÓN.

De este Proyecto, aún quedan en el tintero cantidad ingente de matices de provecho y también algunas posibilidades de mejora, que sin duda, personas mejor preparadas que yo puedan desarrollar.
 Yo mismo he silenciado algunos de esos matices y ya los expondré en el momento oportuno, aunque dudo que después de tantos intentos fallidos, vaya a tener más éxito después de haber sido ignorado durante mas de treinta años.

martes, 18 de enero de 2011

MISCELÁNEAS DE MI NIÑEZ


Con salida a la Calle de D. Antonio Maura - que dicho sea de paso fue el abogado que defendió a mi abuelo Guillermo Cabrera Navarro en un pleito trascendente que ganó- se alzaba poderoso, el portón antiquísimo de la Casa de mi abuela materna, que daba paso a una muy amplia entrada DONDE SE ALOJABA EL CRISTO NAZARENO LOS DÍAS DE SEMANA SANTA.

Esta entrada se comunicaba con una salita a través de una puerta liviana de dos hojas con cristalera a partir de su mitad superior, a la que daba intimidad un visillo traslúcido por cuyo través podía apreciarse perfectamente, desde lejos, la silueta de cualquiera que a él se acercara.

En esta salita había un tresillo compuesto por un sofá y dos magníficos sillones de mimbre, cuyos adornos resaltaban porque sus contornos estaban encerrados por un ribeteado de color azul.

Colgado en la pared, justo sobre el centro del sofá había un reloj con puertecita de cristal, y su péndulo. Más que importunar acentuaba el sosiego de la estancia con su casi imperceptible balanceo, que solo se interrumpía cuando la mano de su genio, (mi tío Tiburcio), infundía nuevas fuerzas a su corazón, que sin ser requerido y siempre puntual, con la gravedad propia de su señorío liberaba las horas, que instantes antes, retuvo amenazadas por las flechas de sus manecillas.

En el centro del semicírculo formado por los tres muebles había una mesita, también de mimbre, sobre la que se apoyaba estrictamente en toda su extensión, una lámina que representaba un paisaje oriental, con lago, puentecito y cisnes, además de un par de geishas que protegidas por sus respectivas sombrillas se alejaban por un sendero y sobre ella, como para protegerla, un cristal cubría toda su superficie.
Separaba a aquella salita de lo que hacía las veces de comedor una cortina de un rojo mate que generalmente estaba recogida, aunque por las tardes, cuando venía a festear el novio de mi prima Carmen, el inolvidable José de Juan Gutiérrez, para todos Pepe, q.e.p.d., misteriosamente quedaban echadas, permaneciendo invisible el rincón del sofá ante la vista de mi pobre abuela que normalmente no acudía a esa dependencia y que además ya estaba casi ciega.

El único que incordiaba a la pareja, más bien a Pepe, era yo, que con mi presencia interrumpía la buena marcha del idilio y predisponía a mi prima a mantener una actitud recatada por temor a que yo pudiera aparecer en el momento mas inoportuno, lo cual provocaba el mal humor en Pepe, que a veces se enfurecía.

Pero mira por dónde, sin ninguna mala intención y ajeno a lo que allí ocurría, yo entraba y salía sin prestar atención a las frases con que Pepe me increpaba, ni a sus miradas de pocos amigos. Llegando a tal extremo mi inocencia que hasta muchos años después, nunca comprendí el motivo de sus enfados.

Me fastidiaba a mí también tener que pasar por delante de los novios, pero era mi único camino para llegar al patio, donde ya a nadie molestaba y en donde podía dedicarme a todas mis aficiones preferidas: "matar hormigas, cazar moscas, comer hojas de geranio, jugar en el agua de la pila, hacer experimentos"

También hacía cárceles para los bichos. Vaciaba los tapones de sidra abriendo en ellos una ventanita hasta conseguir el espacio suficiente para encerrar a un bicho o a varios según su tamaño, cerrando el hueco traspasando alfileres a través del corcho a modo de reja, no teniendo mas que levantar cualquiera de ellos para introducir al bicho y después volverlo a bajar para que ya no pudiese salir. Me gustaba encerrar a las moscardas porque gruñían en su interior zumbando en sus micro vuelos y cuando ya me aburrían levantaba el alfiler lo justo para que pudiesen sacar la cabeza y las acribillaba bajando la aguja, aunque alguna que otra también se me escapó. (¡Joder, qué malo que era!)

Tuve una temporada en que mi afición al ahorro estuvo fuera de lo común.


En la cuadra anexa al patio de la casa de mi abuela había en una pared una piedra bastante grande que estaba casi suelta. La saqué y escarbé un hueco detrás de ella, de forma que si después la ponía, aparentemente allí no había nada. 

En el hueco excavado, cabía con cierta holgura una caja de las de Puros Farias, de los que se hacían a mano por entonces en la Tabacalera de Alicante y que con tanta fruición fumaba mi padre. Este tipo de puros se hacían también en la Tabacalera de Tarragona, pero la diferencia de calidad se apreciaba hasta con la vista.

La caja era de madera y me imagino que mis coetáneos se acordarán de ellas.

Por dentro iba forrada de un papel terso y suave al tacto pero fuerte y resistente y en la lámina que forraba la tapadera por su interior, había una efigie en lo que parecía un medallón, cuya imagen no recuerdo a quien representaba.

En esa caja metí un pequeño bloc de notas y un lapicero, y en él iba anotando las cantidades que iba depositando.
No sólo anotaba los ingresos y arrastraba el saldo, sino que determinaba en qué tipo de moneda tenía repartido mi tesoro, es decir: tres pesetas en papel, una de ellas de Cristobal Colón; cuatro rubias, dos del uno y dos de la cara; seis reales, dos del barco y cuatro de las flechas; veintiuna monedas de diez céntimos; nueve monedas de cinco céntimos...

Aquello duró hasta que un día descubrí algunas monedas más de las que yo tenía controladas y una nota que decia: TE DESCUBRI, "LA MANO NEGRA".

Ya no encontré ningún lugar que fuera propicio ni fiable y mi amor por el ahorro se disipó quizás porque lo que lo mantenía era aquella emoción indescriptible que sentía al llegar al escondite y tras sacar la caja y observarla con un placer casi lascivo, contaba mi dinero y repasaba mis apuntes como si fuera uno de aquellos riquísimos judíos que en su avaricia contaba su dinero constantemente.

Esta imagen que creo que todos siempre hemos tenido de los judíos, "por narices" debe de ser porque siempre así nos los describieron, incluso en los cuentos, LO QUE ME HACE PENSAR AHORA, AUNQUE NO LO PENSARA ANTES, que el antisemitismo siempre ha sido un sentimiento generalizado. En unos abiertamente y en otros de forma solapada.

A mi ni me van ni me vienen. Los comprendo en cierto modo porque sé que algunas reivindicaciones cargadas de violencia, pueden ser más molestas que una mosca cojonera, especialmente cuando proliferan los actos terroristas. Pero no me ha gustado nada, nada nada, verlos inmersos en actividades con muestras de crueldad extrema, que cuando han sido ejecutadas por otros siempre me han inspirado desprecio y que vistas en ellos, además de desprecio me han provocado decepción después de mostrarse como víctimas durante más de cincuenta años.

Pero así es la vida,"hay de todo como en botica". Cada cual se entiende a si mismo y todo tiene una explicación. Y lo que a ti te importa, a mí me la trae floja. ¿Qué camino hay que tomar entonces? ¿Qué actitud es la que debemos adoptar? ¿A quién debemos prestar nuestro apoyo?

Os sugiero que de momento apoyéis mi proyecto económico. Aquí cerquita está titulado "Para poder criticar hay que dar alternativas".

No tiene raza ni credo y solo se fundamenta en la lógica. Y además es justo y necesario. Si teneis algún conocido que pueda catapultar me hasta las altas esferas para que pueda desarrollarlo en presencia de quien puede decidir, echadme una mano.

PARA PODER CRITICAR HAY QUE DAR ALTERNATIVAS - 2ª PARTE

Como vais a apreciar en unos instantes, es cierto lo que dije en mi primer artículo en cuanto a que no podemos sacar conclusiones de un escrito hasta que éste no esté concluido, porque hay matices que se nos escapan y que no veremos hasta que nos los metan por los ojos.
Y si no díganme, poniéndose la mano en el corazón. ¿ALGUNO DE USTEDES SE HABÍA PERCATADO DE QUE EL IMPAGO DEL COMERCIANTE AL DETALL, ÚLTIMO TENEDOR DEL ARTÍCULO ELABORADO, IBA A OCASIONAR UN TRAUMA EN CADENA?

¿Acaso no creen que el fabricante compró sus materias primas con pago aplazado?
Y esto, ¿no les hace presumir que los artículos, que se emplearon a su vez para fabricar estas materias primas, también se compraron por este procedimiento?

Y si el artículo no lo paga quien lo debía pagar, ¿con qué dinero se pagará a quienes deberían de cobrar?

Y SI HEMOS ELEGIDO EL CALZADO COMO EJEMPLO, ¿NO SERÁ VERDAD QUE PARA EL PROCESO DE SU FABRICACIÓN TENEMOS QUE CONTAR CON LOS MATADEROS, ORIGEN DE SU MATERIA PRIMA ESENCIAL, PARA DESPUÉS PASAR POR LAS TENERÍAS O CURTIDURÍAS Y DE ÉSTAS A LOS ALMACENES DE CURTIDOS, SIN OLVIDAR LOS ALMACENES DE OTROS ARTICULOS TALES COMO LOS HILOS, LAS FORNITURAS, LOS ADORNOS, ETC., ES DECIR, TODA UNA CADENA SOBRE LA QUE REPERCUTIRÁ EL IMPAGO DEL COMERCIANTE, ÚLTIMO TENEDOR DEL ARTÍCULO?

TODOS APORTARON PARA HACER UN BUEN BANQUETE Y EL COCINERO SE FUGÓ CON LAS VIANDAS.

Y ES QUE LO QUE ESTÁ MAL ORGANIZADO TRAERÁ TARDE O TEMPRANO MALAS CONSECUENCIAS PARA CASI TODOS.

Pero ahora volvamos a mi proyecto y observen:

Si el comerciante al detall hubiera tenido un Riesgo Comercial, todos los que hay en la cadena de producción, desde el matadero hasta el fabricante propiamente dicho,pasando por el que vendió la mas humilde fornitura, TODOS, TODOS, TODOS, COBRARÍAN.

¿POR QUÉ?

Muy sencillo, mientras que antes el fabricante tenÍa que limitar su producción hasta la capacidad que le permitia su clasificación comercial, SALVO QUE HUBIESE ALGUN GUAPO QUE LE FINANCIASE Y LE PAGASE LA PRODUCCIÓN AL CONTADO, con mi sistema la Clasificación Comercial de un Fabricante, de forma infalible, SERIA LA SUMA DE TODOS LOS PEDIDOS QUE TUVIESE EN CARTERA, ya que ellos estarian garantizados por las clasificaciones comerciales de los comerciantes al detall. Y de igual modo, TODOS LOS PEDIDOS SERVIDOS POR LOS PROVEEDORES PARA EL PROCESO DE FABRICACIÓN DE ESOS PEDIDOS IRIAN GARANTIZADOS POR LA CLASIFICACIÓN COMERCIAL DEL FABRICANTE, AVALADA POR LOS PEDIDOS DE LOS COMERCIANTES.

Podría parecer complicado el proceso, pero puedo asegurar que es sumamente fácil de controlar y de ejecutar, pudiendo además, valerse tanto el industrial como el comerciante del seguimiento bancario, como un control adicional de su propia contabilidad.
NO PODÉIS IMAGINAROS LA TRASCENDENCIA QUE ESTA FORMA DE TRABAJAR TENDRÍA PARA TODAS Y CADA UNA DE LAS ACTIVIDADES, HASTA TAL PUNTO, QUE SERÍA CASI IMPOSIBLE HACER UNA OPERACION FUERA DE CONTROL Y MUCHO MENOS PERPETRAR UN ROBO IMPUNEMENTE. AUNQUE SOBRE ESTO YA HABLAREMOS.

Y ¿QUE OCURRIRÍA ENTONCES?

Muy sencillo, todos los industriales y todos los comerciantes tendrían su correspondiente clasificación comercial cuyo límite vendría marcado por su propia garantía personal, más el montante de su cartera de pedidos.
Cada pedido tendria que estar aprobado por el banco que concedió el riesgo al cliente y éste controlaría la marcha del riesgo, garantizando cualquier pedido que se le presentase mientras no se hubiese superado el limite, en cuyo caso no se aceptaria el pedido.
EJEMPLO:

El viajante de la firma XX, visita al comerciante J.C. que compra de su catálogo los productos ?????, por un montante de 5000 euros.
En el pedido se hacen constar todos los datos imprescindibles, entre ellos el Banco que tiene que avalar el pedido y una vez firmado y sellado éste por la pesona autorizada para ello, el viajante pasa al banco y última el trámite rellenando en el encasillado reservado para ello y obteniendo la firma y sello del banco. Y el banco a su vez anota en sus registros el importe del pedido, que se descontará de la cantidad que hasta ese momento disponía el comerciante como saldo en su clasificación, anotando su nuevo saldo.
Estas operaciones se harán a la inversa cuando sea a esta empresa a la que se le realice una compra con precio aplazado.
NO CREAN QUE ES COMPLICADO PORQUE ESTO ES LO QUE YA SE VIENE HACIENDO. CON LA UNICA DIDERENCIA DE QUE EL CONTROL SE LLEVA SOBRE LA CLASIFICACION COMERCIAL DE INDUSTRIAL, CUANDO DEBERIA DE LLEVARSE SOBRE LA DEL COMERCIANTE AL DETALL, QUE ES A QUIEN SE LE DEBERIA DE EXIGIR.

NO VOY A MATIZAR MÁS SOBRE EL PROCEDIMIENTO PORQUE HAY UNA SERIE DE DETALLES QUE TENDRIA QUE EXPLICAR Y PODRIA HACERSE MUY ÁRIDA ESTA SENCILLA EXPOSICIÓN.

Pero sí quiero recalcar algo que probablemente tampoco hayan tenido ustedes en cuenta si se llevase a efecto mi proyecto; algo que repercutiría en beneficio de todos y que reafirmaría mi teoria de que todo lo que se hace bien solo produce el bien y me refiero a que por el procedimiento actual cuando el dueño de la Tenería compra las pieles con pago aplazado, al importe de las mismas se les repercute el gasto que va a ocasionar la negociación de ese papel.

Hagamos un pequeño estudio sobre el supuesto del Calzado en una escala de 100. El matadero vende 100 y carga por gastos de negociación un 5% a la Tenería. Los porcentajes pueden no estar adecuados al momento actual. En mis tiempos, este era un porcentaje normal.

¿SERÁ ENTONCES VERDAD QUE EL PRODUCTO SE HA ENCARECIDO EN UN 5%?

LA CURTIDURIA VENDE AL ALMACÉN VOLVIENDO A CARGAR EL PRODUCTO EN OTRO 5% POR GASTOS DE NEGOCIACION. ¿SERÁ YA EN ALGO MÁS DE UN 10% EN LO QUE SE HA ENCARECIDO EL PRODUCTO?

DEL ALMACEN PASEMOS AL INDUSTRIAL, REPITIÉNDOSE EL GASTO CON UN INCREMENTO YA SUPERIOR AL 15%, PUDIENDO PASAR AL 20 % SI VENDE AL COMERCIANTE DIRECTAMENTE EL INDUSTRIAL O AL 25% SI ÉSTE COMPRA ATRAVÉS DE ALGÚN ALMACEN DE VENTA AL POR MAYOR.

APLIQUEMOS ESTA MISMA ESCALA A TODOS LOS PRODUCTOS COMPLEMENTARIOS Y SIGUIENDO CADA UNO DE LOS PASOS HASTA LA TOTAL ELABORACIÓN. ESTOY SEGURO DE QUE CUANDO LLEGUEMOS AL COMERCIANTE AL DETALL EL PRECIO SE HABRÁ INCREMENTADO EN NO MENOS DE UN 25 % .

¿NO LES EMOCIONA QUE CON MI PROYECTO SÓLO HUBIESE HABIDO UN GASTO DE FINANCIACION INFERIOR EL 5%?

Si cuando se pudiera negociar este proyecto entre el Estado y La Patronal, ésta, tuviese certeza de que LA PALABRA IMPAGADO IBA A QUEDAR DESTERRADA, ¿no creen que habría muy buena predisposición a establecer unos márgenes de beneficio muy por debajo de los actuales en los que se tiene que contar con las mermas que por éste y otros daños colaterales actualmente se tienen que preever?
Y el estado, sabedor de que estas medidas van a suponer un saneamiento en la economia que entre otras muchas cosas reduciría su desembolso por subsidios e incrementaría sus ingresos por cotizaciones, ¿no creen que podria anular los impuestos que inciden en esta previsión?

¿Han pensado ustedes que estas actitudes permitirían rebajar el costo de producción en UN MÍNIMO DE UN 15%, QUE UNIDO AL 25 % DE REDUCCIÓN DE LOS GASTOS DE FINANCIACION SUPONDRIA UN 40% DE AHORRO EN EL COSTO DEL PRODUCTO INTERIOR?

¿Y NO LES EMOCIONA QUE DE UN PLUMAZO, POR CADA EURO QUE DESEMBOLSAMOS SÓLO TENGAMOS QUE DESEMBOLSAR 0,60 CÉNTIMOS?

Si a esto añadimos los beneficios colaterales que podríamos obtener y consideramos el mínimo esfuerzo que supondría para el Gobierno establecer una normativa por la que se obligara a cualquier comerciante al detall a estar en posesión de una clasificación comercial, que además en justicia se precisa, el que no hagamos nada al respecto ES DEMENCIAL.

Las mejores muestras para identificar la grandeza de un proyecto, residen en su bondad, su falta de agresividad, los grandes beneficios que conlleva sin exigir a cambio ningún perjuicio para nadie y sobretodo SU SENCILLEZ.
Y en éste mi proyecto veréis la muestra.

CONTINUARÁ...


lunes, 17 de enero de 2011

PARA PODER CRITICAR HAY QUE DAR ALTERNATIVAS

Es muy difícil trasladar a los demás un programa económico y muchisimo mas dificil si ese programa es perfecto.
Lo primero es hacer una exposición siguiendo un orden coherente y razonado.
Se ha de ir con mucho tiento para explicar con claridad meridiana cualquier matiz, que mal interpretado pudiera entorpecer la comprensión, arruinando el proyecto.

Los pocos que verdaderamente presten alguna atención a lo que van a leer, con la loable intención de comprender y con el compromiso, si es preciso, de comprobar, nunca deberán olvidar que el hombre, en sus limitaciones, no puede exponer por escrito de forma instantánea, como si fuera una fotografía todo un panorama en el que se contemplen, además de las propuestas, las respuestas a los interrogantes que la próbida lectura les pueda sugerir, porque pueden correr el riesgo de inquirir precipitadamente y no precisamente por el camino adecuado, llegando a conclusiones equivocas que puedan desmerecer el proyecto de antemano, abortándolo sin haber dado opción a su total desarrollo.
Yo propongo que sean pacientes y podrán ir obteniendo las respuestas a todos sus interrogantes, con el solo esfuerzo de prestar atención a lo que con todo esmero y con el mayor lujo de detalles pienso desarrollar. DEJANDO SIEMPRE LA POSIBILIDAD DE, UNA VEZ TERMINADA MI EXPOSICIÓN, DAR RESPUESTA A CUALQUIER DUDA, O A SOMETER A DEBATE AQUELLOS PUNTOS SOBRE LOS QUE PUDIERAMOS NO HABER LLEGADO A UN ACUERDO.

Hay dos caminos esenciales que hay que recorrer para poder culminar con éxito este proyecto, que si leéis con cariño y con atención, estoy seguro que os va a entusiasmar.

PRIMERO:

HAY QUE VARIAR LAS ESTRUCTURAS DE NUESTRAS FUENTES DE FINANCIACIÓN.
Actualmente, salvo que haya cambiado durante los cinco años en que estoy ausente, cualquier empresa, hablemos por ejemplo de una Fábrica de Calzado, para establecerse, además de tener que contar con la Fábrica propiamente dicha, con todas sus instalaciones, refiriéndome no solo a las máquinas y sus fuentes de suministro eléctrico, sino tambien al contingente humano de dentro y de fuera; al parque móvil, a los proveedores, a las licencias, a los permisos, a las altas en la Seguridad Social tanto de la empresa como las de sus trabajadores, que por cierto a estas alturas todavía no han empezado a producir; sus seguros; los clientes potenciales, ya que sin ellos sería absurdo cualquier montaje, etc., etc. Como decia, además de todo esto, para poder empezar a trabajar vendiendo por el sistema tradicional de pago aplazado que en mis tiempos era de 30, 60 y 90 días, el fabricante, tenía que contar con una Clasificacón Comercial o "Riesgo Comercial" según se prefiera.

La Clasificación Comercial era la cantidad en Pesetas, ahora Euros, que el Banco estaba dispuesto a abonar en la cuenta del Fabricante a cambio del Papel, (letras de cambio), que este le remesase para su cobro. Era esta una cantidad que el Banco se comprometia a respetar y el fabricante no podia sobrepasar, pero en los tiempos de bonanza, la elasticidad de su limite venia condicionada a las mas extravagantes de las circunstacias, que entre otras y para que os hagais una idea podia ser por ejemplo; " que las altas esferas del banco decidiesen absorver mas papel", por cuestiones que ya entran dentro de lo que se llama macroeconomia.,Esta medida podia cambiar en relativo poco tiempo, volviendo a ser estrictos en sus límites, con los consiguientes desacompasados pasos de la economia.

Los vaivenes de las crisis que a tantos arruinaron, dieron lugar a que los Bancos, que nunca quisieron estar entre los perdedores, impusieran su ley, cada vez con más rigor.
En las fechas en que yo todavia trabajaba para el Banco, para conceder una cCasificación Comercial, los fabricantes tenían que responder con todos sus bienes, teniendo además que aportar el aval de cualquier ser viviente que le tuviera el mas mínimo aprecio si es que quería obtener un mediocre Riesgo.
Las personas que avalaban a los fabricantes contaban con la intachable honradez de la persona a la que asistían, sin tener en cuenta que por muy honrada que ésta fuera, si no le pagaban lo vendido, no podria evitar que los bancos se incautasen de lo de él y de lo, de los demás.

Aún dieron los bancos algunas vueltas más a la tuerca, limitando al mínimo estas clasificaciones comerciales. Lo cual suponia que cuando una empresa tenia la posibilidad de tener un respiro porque sus viajantes hacían una buena temporada, la limitación de los riesgos impedía que se pudiesen atender los pedidos al tener excedidos los riesgos, no pudiendo nunca despegar de un aeropuerto cuya pista era toda un socavón.

Los fabricantes buscaban soluciones y, con la mayor picaresca, aportando las garantías que ya habían dado a otros bancos, solicitaban nuevos riesgos en nuevas entidades a las que acudían como nuevos clientes, especialmente en los nuevos bancos que se abrían en la localidad, pudiendo, a duras penas, capear el temporal al conseguir que su Clasificación Comercial, se multiplicase por dos, por tres o por lo que le permitiesen las Entidades si es que lo aceptaban como cliente.

Así pasó el tiempo con muchas festivas o tristes anécdotas que contar que no vienen al caso que nos ocupa, pero a las que haré colacion de inmediato por ser aclaratorias para lo que pretendo.

A pesar de sus triquiñuelas, los industriales carecían de liquidez y tenían que esperar a veces, (me imagino que así ocurrirá también ahora), a que venciesen las remesas negociadas para que el banco les admitiese nuevo papel, con tal de tocar algo de dinero, pero la sorpresa llegaba cuando lo que el banco recibía eran las letras impagadas de las remesas vencidas, que además de impedir que el fabricante pudiera negociar nuevo papel, le obligaba a ingresar un efectivo que no tenía para compensar los descubiertos que esos impagados habian provocado.
Y AQUI VIENE LO QUE ME DEJÉ SIN DECIR ANTES:

COMO LOS DIRECTORES DE LOS BANCOS SABÍAN DEL EFUGIO DE SUS CLIENTES PARA CONSEGUIR MEJORES CLÁSIFICACIONES COMERCIALES Y SEGÚN LA LEGISLACIÓN ESPAÑOLA EL ACREEDOR QUE RECLAMA PRIMERO DE FORMA EXPRESA TIENE PRIORIDAD ANTE LOS DEMÁS, SALVO EN CASOS ESPECIALES, CUANDO ALGÚN BANCO VEÍA EN LA MAS MÍNIMA DIFICULATAD A ALGÚN FABRICANTE, LO EMBARGABA, CON LAS CONSECUENCIAS QUE ELLO ACARREABA, ANTES DE QUE OTRO BANCO SE LE PUDIERA ADELANTAR, PRÁCTICA ESTA QUE ESPERO NO SEA TAN DRÁSTICA EN LA ACTUALIDAD.

HECHA ESTA EXPOSICIÓN PARA QUE CADA CUAL PUEDA ENTRAR EN CONCIENCIA DEL PROBLEMA DE FINANCIACÓN QUE SUSFRIAN Y ME IMAGINO QUE SUFREN LOS INDUSTRIALES, PREGUNTO:

Si la ley debe sujetarse a lo que es mejor para todos y debe estar lo más cerca posible del concepto que cualquier mente civilizada puede tener de la justicia. EN UNA TRANSACCION ENTRE UN INDUSTRIAL Y UN COMERCIANTE AL DETALL, EN LA QUE TODOS SABEMOS QUE EL FABRICANTE APORTA UNA INFRAESTRUCTURA INMENSA, CON OBLIGACINES QUE REPERCUTEN SOBRE UN INGENTE NÚMERO DE FAMILIAS, QUE APORTA TODAS LAS MATERIAS PRIMAS PARA LA ELABORACIÓN DEL ARTICULO QUE VENDE, ETC. ETC., SIENDO RECIBIDO ESTE ARTICULO COMPLETAMENTE TERMINADO Y LISTO PARA LA VENTA AL DETALL POR UN COMERCIANTE QUE NO HA CONTRIBUIDO EN ABSOLUTO EN SU PRODUCCIÓN Y QUE POR EL SOLO HECHO DE PONERLO EN LOS ESTANTES DE SU TIENDA VA A PONERLO A LA VENTA CON UN MARGEN COMERCIAL INMENSAMENTE MAYOR QUE AQUEL QUE LO FABRICÓ, ¿¿¿ES JUSTO QUE SI ESTE COMERCIANTE, ¡¡¡¡QUE ESTÁ EN POSESIÓN DEL ARTICULO!!!! SI NO PAGA ,TENGA QUE SUFRIR LAS CONSECUENCIAS DE ELLO QUIEN TODO LO PUSO Y AHORA NADA TIENE????

NO PUEDE QUEDAR EN LA IMPUNIDAD NINGUN COMERCIANTE DE PACOTILLA POR EL SOLO HECHO DE SER INSOLVENTE, SI NO TIENE LIQUIDEZ QUE LA BUSQUE O QUE APORTE AVALISTAS IGUAL QUE ASI SE LE EXIGE HASTA EL MOMENTO A LOS FABRICANTES Y ESO QUE SON ELLOS LOS QUE HACEN EL ARTICULO, MIENTRAS QUE EL COMERCIANTE ES EL QUE LO RECIBE.

Y SI NO PAGA ALEGANDO QUE NO HA VENDIDO EL ARTICULO, QUE LO PONGA EN OFERTA REBAJADO YA QUE AUNQUE LO VENDIERA POR EL PRECIO DE COSTE NO TENDRIA NINGUN DETRIMENTO. ¿O A CASO DIVIDIÓ SUS BENEFICIOS CON EL FABRICANTE EN LOS PEDIDOS QUE VENDIO CON EXITO?

¿¿COMO PUEDE PERMITIRSE LA APERTURA DE COMERCIOS A NOMBRE DE PERSONAS INSOLVENTES??

¿¿POR QUÉ NO SE LES EXIGEN AVALISTAS IGUAL QUE SE LES EXIGEN A LOS FABRICANTES??

¿¿QUÉ CULPA TIENE EL FABRICANTE DE QUE UN ARTÍCULO SE PUEDA ESTANCAR EN LOS ESTANTES DE UN COMERCIO AL DETALL??

¿¿NO ES CIERTO QUE AUNQUE HUBIERA ALGÚN MENOSCABO EN LA VENTA, EL COMERCIANTE SIEMPRE RECUPERARÍA ALGO POR BARATO QUE LO VENDIERA??

¿¿¿NO ES CIERTO QUE CUALQUIER DUEÑO DE UNA ZAPATERIA SABE MÁS O MENOS LA CANTIDAD QUE VENDE AL AÑO Y QUE CONSIGUIENDO UNA CLASIFICACIÓN COMERCIAL POR LA CUARTA PARTE DEL MONTANTE TOTAL DE SUS VENTAS TENDRIA CUBIERTAS SUS NECESISDADES DE FINANCIACIÓN????

¿¿NO ES CIERTO QUE LA CLASIFICACIÓN COMERCIAL DE UNA ZAPATERÍA SIEMPRE SERÁ INMENSAMENTE MENOR QUE LA QUE PRECISA UN FABRICANTE Y SERÍA MAS FÁCIL QUE SE LA CONCEDIERAN A ÉL SOLITO SIN AYUDAS NI AVALES, EVITANDO ESTE TRAUMA AL FABRICANTE QUE MAS EXPONE??

¿¿NO ES CIERTO QUE DE ESTE MODO LOS BANCOS NO TENDRÍAN ESE DOBLE O TRIPLE JUEGO DE INTERESES QUE LES OBLIGA A SER LOS VERDUGOS DE SUS PROPIOS CLIENTES AL TEMER QUE SI NO SON LOS PRIMEROS EN EMBARGAR, SERA OTRO EL QUE LO HAGA Y QUEDARAN FUERA DE JUEGO??

¿¿NO SERÁ TAMBIÉN MÁS CÓMODO PARA ELLOS EL SABER QUE PASE LO QUE PASE ESA JUGADA NO LA PODRÍAN HACER LOS COMERCIANTES PORQUE SU CLASIFICACIÓN COMERCIAL SE LES ASIGNARÍA TRAS UNA ANOTACIÓN REGISTRAL EN LA QUE SE HARÍA MENCIÓN DE LA CANTIDAD POR LA QUE RESPONDE LA GARANTÍA REAL AFECTADA??

¿¿PODRÁ SER QUE AL NO EXISTIR NINGÚN TEMOR, LOS BANCOS TENDRÁN UN MARGEN AMPLÍSIMO PARA EJECUTAR, SABIENDO QUE NADIE PUEDE ADELANTÉRSELES Y ESTÁN A SALVO DE CUALQUIER PÉRDIDA, PUDIENDO EN ESE TIEMPO RECUPERARSE LA FIRMA SIN NECESIDAD DE CERRAR O TENER QUE MALVENDER??

¿¿¿NO ES CIERTO QUE SI ALGUN COMERCIANTE QUISIERA VENDER LOS BIENES DADOS EN GARANTÍA SOLAMENTE TENDRÍA QUE PRESENTAR EN EL REGISTRO CERTIFICACIÓN DEL BANCO EN LA QUE CONSTASE HABERSE CANCELADO LA CLASIFICACIÓN COMERCIAL QUE LO GRAVABA????

Y AHORA SOBRETODO:

¿¿NO ES CIERTO QUE, UNA VEZ EFECTUADO ESTE CAMBIO, CUALQUIER VIAJANTE NO TENDRÍA MÁS QUE CONFIRMAR EL PEDIDO DEL COMERCIANTE CON EL VISTO BUENO DEL BANCO DONDE TUVIERA LA CLASIFICACIÓN COMERCIAL PARA QUE ¡¡ESTE PEDIDO!! TUVIERA EL VALOR DE UN CHEQUE BANCARIO QUE NADA NI NADIE PODRÍA INVALIDAR??

Esto no es más que un aperitivo de lo que viene, porque vais a poder comprobar que cuando la convivencia en todas sus manifestaciones, se apoya en pilares justos, bien estructurados, todo lo que surje de ella es positivo porque no hay caminos abiertos a la maldad ni a la marrulleria.
Y mi proyecto contempla no solo la injusticia que ya casi tenemos a la vista, sino que al enmendarla, surgen sus consecuencias como una cascada que va limpiando y corrigiendo todas y cada una de las manifestaciones de la vida.  Y si no me creéis, seguid leyendo.

CONTINUARÁ...

sábado, 15 de enero de 2011

LAS ESTACIONES DE FERROCARRIL


No voy a referirme a las grandes estaciones de las capitales importantes por donde deambulan de continuo gentes que forman parte de las mismas, como si fuesen muebles, por su constante presencia, recorriendo los andenes, observando en las salas de espera...
A veces son vigilantes que escudriñan la posible presencia de los amigos de lo ajeno, otras son funcionarios que cumplen otros cometidos; también los hay en las taquillas, vendiendo los boletos, en las salas de equipajes alquilando los armarios o vigilando y controlando los aseos; los hay facilitando información o promoviendo encuestas y en conjunto todos ellos cumpliendo honestamente con el cometido que les corresponde según su obligación.

Mezclados con los que allí trabajan, están los que por allí acuden como un medio de vida, trasladando equipajes; vendiendo los artículos mas insólitos; tratando de arrastrar a los transeúntes a cualquier pensión del entorno; prestándose a hacer cola ante las ventanillas para evitar a otros la molestia en busca de una propina; no faltan las que exhibiendo sus más o menos atractivos cuerpos, van a la caza de algún transeúnte necesitado de calor humano, o de algún otro, vicioso, que sienta la llamada de su concupiscente necesidad.

Aunque me inspiran cierta tristeza, me gusta ver a esos artistas que superviven haciendo rapidísimos retratos al carboncillo a los muy pocos que se prestan, deseando en mi fondo colaborarles, pero sintiendo una extraña represión que me impide hacerlo, a pesar de mi deleznable autocrítica. Tambien me producen desazón los que lisa y llanamente piden limosna abiertamente y los que la solicitan de forma solapada diciendo que les falta cierta cantidad para completar el precio de un billete que nunca comprarán. En todos hay cierta tensión, como si rehuyeran la mirada vigilante de quienes tienen como misión desalojar a quienes puedan perturbar la buena marcha de estos recintos inmensos en los que los viajeros son los únicos autenticos extraños mientras que a los asiduos, los pícaros y mucho más que pícaros todo el mundo los conoce y entre ellos, se conocen como la palma de su mano.

Nunca podrían servir estas estaciones para encontrar en ellas el hechizo entrañable de las Estaciones de pueblo, al carecer de la la intimidad que para ello se precisa, al haber en ellas este gentío, aún mas patente por el ir i venir de los que aun siendo pasajeros, realmente forman parte de los asiduos, porque sus destinos no van mas allá de los pueblos cercanos a la capital y su aventura se limita a acudir a sus puestos de trabajo, haciéndolo a diario, como una rutina, sin ninguna emoción, aunque pueda haberla en algunas circunstancias especiales. Pero aún así, incluso en los casos de los que van más lejos, como nadie los conoce, a nadie les importan ni les inquietan.
No existe en estos pasajeros, como trataba de decir, la emoción que se confiere a los que ante nuestros ojos tienen una identidad precisa, como amigo, como vecino o como hijo del pueblo en el que vivimos. Ni sabemos el motivo de la partida, tantas veces única posible solución para eludir los problemas o conseguir ese logro que en nuestras pequeñas estaciones sería casi de dominio público, porque todos lo han comentado tantas veces, que la presencia en el anden no es más que la confirmación de que por fín se lleva a efecto.

La incertidumbre, la ilusión, la esperanza, incluso el pánico que a veces nos domina, son realidades que conmueven a cualquier viajero de pueblo, porque son sentimientos inherentes a quienes viajan por necesidad, hacia un destino generalmente trascendente y salvo que se realice de improviso, por una urgencia inevitable, no puede existir ninguna confidencialidad en estos pueblos que como el mío, era en mi juventud como un pañuelo.
Mas, si no se supo nada en el momento de la partida por los motivos apuntados, seguro que de inmediato correria como un reguero la información sobre la hora, el motivo, el destino y la misión del viajero porque nunca faltarían los portavoces de la familia que informarían a todos porque en verdad todos éramos directa o indirectamente sus amigos y conciudadanos. ¿No suena casi a ciencia ficción? Pues no, son solo los recuerdos de un viejo, sumido en la nostalgia de tiempos mejores.

También es lógico que prefiera elegir una de estas Estaciones de Pueblo porque normalmente estaban alejadas del núcleo urbano y teníamos que llegar a ellas valiéndonos de cualquier medio de locomoción más o menos improvisado, ya que por aquellos años, no había casi ningún coche, pudiendo por su habitual soledad ser muy pocos los testigos de aquellas escenas, que de forma imborrable quedaban en el corazón de quienes las vivian y como mínimo, daban una pequeña punzada en el corazón a los pocos testigos de privilegio.
Yo me quedo con mi estación, pero que cada cual elija la que mayores recuerdos le evoque.

La estación de mi pueblo es la de ELDA-PETREL, que como una premonición ya se inauguró con este nombre muchísimo antes de que yo naciera, sin que por entonces nadie sospechara que los dos pueblos formarían uno solo en el futuro.

Nunca perdió esa magia de las estaciones de pueblo, porque en sí no cambió y en cuanto al incremento de población se niveló con el detrimento de los viajes por ferrocarril, aunque sí se notó cierta indiferencia entre los viajeros, porque la ciudad ya nunca fue el pañuelo de antaño, haciéndose aún mas entrañables las despedidas al sentir mucho mas el frio en el ambiente.

LO QUE DE ELLA PUDIERA CONTAR SERÍA UN CALCO CASI EXACTO DE LO QUE ACONTECIERE EN OTRAS ESTACIONES SIMILARES. NO PUDIENDO QUITAR NI PONER NI UN GRAMO DE EMOCIÓN PORQUE LA VERDAD NO ES SUSCEPTIBLE DE MODIFICACIÓN ALGUNA, SIENDO LOS LUGARES Y LOS PERSONAJES LO DE MENOS YA QUE VIRTUALMENTE TODOS SOMOS IGUALES.
Los sueños, las esperanzas, las nostalgias y cualquier otro sentimiento cuyo origen sea nuestra propia alma desnuda de odios y resentimientos, no pueden enfrentar respecto a los que los demás experimentan, ninguna diferencia. Nuestras almas son idénticas y también nuestros sentimientos, AUNQUE PODAMOS SER DIVERSOS EN CUANTO A RAZAS Y EN CUANTO A CREDOS.
Cuando de niños, acudíamos a ver pasar los trenes, conscientes de que nuestros padres nos reñirían muchísimo si se enteraban, era poco frecuente encontrar pasajeros en la estación. La gente viajaba lo imprescindible. QUIZAS FUERA POR ELLO, POR LO QUE CON TAL DE CONTRADECIR, NOS SENTABAMOS EN LOS BANCOS DEL ANDEN PRINCIPAL, FRENTE A LAS VIAS, SOÑANDO VIAJES mientras respirabamos esa brisa característica en aquel lugar, en la que se mezclaba con el aire fresquísimo, un poco del aroma de los pinos del altico, otro poco del olor indescriptible del moho de la herrumbre de las vias y los convoyes de mercancías allí estacionados y otro tanto del olor casi agradable del humo del carbón que era el combustible por excelencia y que todo lo impregnaba, así como la carbonilla con la que de forma misteriosa, siempre, siempre, siempre, que por allí acudiamos, nos ensuciabamos los calcetines blancos.
Imaginábamos, en nuestra ignorancia, rutas imposibles, cubriendo las etapas hacia nuestros destinos con tal rapidez que era obvio que nuestros cálculos fueran tan incorrectos como los itinerarios que pretendíamos seguir rotando sobre los railes de aquellas rutas férreas, interminables en nuestra fantasia.

Soñábamos despiertos imaginando las cosas que podríamos ver, que no eran otras que las que habíamos visto en las películas de aventuras, especialmente en las de Tarzán, que por aquellos tiempos era nuestro héroe. Y nos corregíamos unos a otros cuando el que hablaba se equivocaba en lo mas mínimo, porque todos conocíamos al dedillo los parajes y las tramas que cualquiera quisiera relatarnos, siendo ya verdaderas autoridades en lo que se nos trataba de describir al haberlo visto tantísimas veces, sin cansarnos, en las sesiones de tarde del Cine Coliseo.

Qué poco cambió la imagen de mi estación a lo largo de los años y qué pocos seremos los que no tengamos algo triste que contar que no tenga alguna relación con ella.

No voy a tratar de imaginar las muchísimas escenas que se habrán vivido en sus andenes o en su sala de espera, tan insoportablemente fría en el invierno. Tampoco voy a referir las que trascendieron o las que conozco de primera mano PORQUE SIEMPRE ME QUEDARÍA CORTO PARA CALIFICAR LAS NOSTALGIAS Y TORPE PARA DESCRIBIR LAS TRISTEZAS.

Por eso dejo a cada cual con sus recuerdos para que se ubiquen en ese marco, de cualquier estación, que a mí siempre se me antoja más triste que alegre, y ojalá sus recuerdos les despierten una sonrisa, porque también hay regresos exitosos y reencuentros felices.

De todos modos, si así no fuera y es la tristeza la que nos sale al encuentro, recibámosla como algo que también puede enriquecernos, incluso darnos felicidad si la contemplamos como algo ya pasado.

Mi último viaje en tren lo hice desde mi propincua estación, por la que pululan tantísimos recuerdos. Tenía sesenta y cuatro años cumplidos y estaba tan disminuido físicamente que el final que cualquiera me hubiera augurado no sería otro que sucumbir en una sala de cualquier hospital mejor o peor atendido. Fui hasta Madrid para de allí tomar el avión que me traería a America del Sur. No sé si volveré a hacer ese recorrido a la inversa y ahí está la grandeza de los viajes... LA INCÓGNITA DE LO QUE PUEDE SURGIR POR ELLOS.

Y a propósito, y sin ninguna animosidad; la primera decepción que sufrió mi esposa en su matrimonio fue cuando en el viaje de bodas no quise llevarla a la Isla de Benidorm.
Le aseguré que si viajábamos hasta la Isla, que no era más que un peñón inhóspito, nuestro único aliciente iba a ser mirar hacia la costa, por lo que era absurdo el separarnos de lo que tanto íbamos a anhelar. MALDITO SOFISMA QUE NO ME PERDONÓ JAMÁS. Pero en él hay mucho de cierto.

Nos pasamos la vida añorando lo que no tenemos, acordándonos con cariño hasta de los lugares donde sufrimos. Mantengamos pues en cada pueblo una estación donde poder despedirnos y reencontrarnos si cabe, pero sobretodo para contar con ella cuando nos apremie nuestro espíritu viajero, aunque sepamos de antemano que entre viaje y viaje nos va a achuchar, sin duda, la añoranza.

miércoles, 12 de enero de 2011

RELATOS QUE PUDIERON SER CIERTOS nº 11


Después de los Servicios Religiosos y de la Santa Misa, prácticas de ineludible obligación para todos y cada uno de los Monjes de la Abadía, cada uno de ellos realizaba las tareas que particularmente les había encomendado el Padre Prior.

Los trabajos asignados eran de carácter temporal, siguiendo una rotación con el fin de que no existiera ninguna discriminación, si bien, algunas actividades tenían asignado un monje de forma permanente para que nadie viniera a romper los programas establecidos ni el estilo de los trabajos realizados, conseguidos con el esfuerzo de muchísimos años.

Uno de los monjes que tenía una ocupación de forma permanente y por sus cualidades totalmente insustituible era el Hermano Amanuense, que por su pulcritud, su paciencia, su amplía cultura, su preciosa letra y su alma de artista era indiscutible titular de la biblioteca de la Abadía, habiendo trascendido su fama fuera de ella por las copias realizadas de algunos manuscritos, ejemplares únicos, que por encargo de altas dignidades habían sido copiados, con el sello inconfundible de la mano de artista que se apreciaba en todos los trabajos de nuestro Hermano Amanuense, que así se le solía llamar a pesar de que su nombre era Fray Antonio.

Verlo trabajar ya era todo un espectáculo.

Ponía ante si las tintas, debidamente ordenadas, de arriba a abajo, de acuerdo con el orden del espectro de la luz, del rojo al violeta en toda su intensidad y a la derecha de cada color diversas tonalidades por él preparadas.
Tenia un plumín para cada color y para cada tonalidad y todos los tinteros estaban situados a la derecha de un separador para que, en caso de que por accidente pudiera volcarse cualquier recipiente, la tinta no pudiese entrar en contacto ni con el original ni con la copia que se estuviera realizando, evitándose así posibles daños irreparables.

Lavaba y secaba escrupulosamente sus manos antes de iniciar cualquier trabajo y antes de empezar a copiar leía detenidamente el texto del párrafo que como tarea se impusiera en ese día, para que el tipo de letra y los adornos a emplear fueran en consonancia con el texto.

Fray Antonio era un artista y como tal sus copias siempre superaban al original en belleza, aunque nunca osase alterar ni una sola coma del texto.

Todos los demás adornos eran de su entera imaginación, especialmente las letras ornamentadas de los títulos preliminares y las letras iniciales de cada versículo, pudiendo tardar a veces más de un día para escribir un solo párrafo.

Como los encargos no proliferaban y Fray Antonio tenía un espíritu muy inquieto, cuando no había copias que realizar, escudriñaba hasta en los últimos rincones, ojeando los libros que estaban sin clasificar situados en los anaqueles de la sala inmediatamente posterior a la biblioteca propiamente dicha y los que había amontonados por el suelo de la misma formando verdaderas calles, para de ellos transferir a otros Conventos de la Orden los que no encerrasen un especial interés bibliográfico, ya que por falta de espacio era totalmente imposible registrar, clasificar y ordenar todos los allí acumulados, procedentes de donaciones particulares, además de los que tras su permanencia durante cientos de años por las alacenas, nunca se trasladaron a otros estantes por su evidente deterioro.

En una de las incursiones de Fray Antonio a lo que empezaba a ser un organizado desorden, entre los libros y legajos le llamó la atención un libro que no había visto nunca antes por estar casi oculto tras uno de los adornos de la gigantesca estantería que había en uno de los laterales de la sala.

Era lógica su curiosidad porque entre tantos libros antiquísimos, éste tenía todas las características de haber sido comprado de una libreria unas horas antes, y a él le constaba que a esa sala tan solo él tenía acceso.

Extrañado y confuso, tomó el libro entre sus manos, percatándose de que la apariencia de nuevo aún ganaba si se le observaba con atención, pudiendo apreciarse su excelente estado de conservación a pesar de que tanto su papel como las pieles empleadas para su encuadernación eran completamente iguales a otros ejemplares allí almacenados cuya antigüedad superaba los quinientos años.

Nada más fácil que abrir el libro para ver su fecha de publicación, pero ninguna fecha aparecía en él, ni de edición, ni de tasación, ni detalle por el que se pudiera identificar. Es más, ESTABA COMPLETAMENTE EN BLANCO, SALVO LA NUMERACIÓN DE LAS PAGINAS Y EN MITAD DE LA ÚLTIMA LA PALABRA: "FIN", CON UNA NOTA AUTÓGRAFA DEBAJO DE ESE "FIN" EN QUE PODIA LEERSE: "Y esto es todo lo que para mi salvación puedo ofrecer"

El pobre monje estaba perplejo, pero aún así, antes de comunicar su hallazgo al Prior, trató de descifrar lo que a todas luces era un enigma, devanándose el seso sin encontrar ninguna explicación, ni de la procedencia, ni mucho menos del mensaje de aquel libro que, a pesar de su buen estado de conservación, debía de ser antiquísimo; sin entrar en consideraciones sobre el por qué del vacío de sus páginas y el de aquella nota autógrafa en la que parecía que se estaba ofreciendo algo QUE DEBERÍA FIGURAR EN ALGÚN TEXTO QUE EN REALIDAD NO EXISTÍA.

Los días pasaron sin que el monje desatendiese ninguna de sus obligaciones con la meticulosidad por él acostumbrada, pero en las noches, después de haber atendido sus oraciones y deprecaciones, como si fuese una carcoma el recuerdo del libro roía su cerebro obligándole a analizar lo que cientos de veces ya había analizado sin encontrar una respuesta determinante.

Una mañana, como si alguien le hubiese dejado un mensaje dictado e impreso en su conciencia, decidió ser él mismo el que iniciase y concluyera ese libro fantasma, como un diario en el que iria anotando lo que humildemente creyera que era digno de ser ofrecido a Dios, dejando provisionalmente en blanco la fecha de inicio por si sobre la marcha recordaba algún hecho pretérito que mereciera ser anotado.

Pasaron los años y nuestro Padre Amanuense, como cualquier mortal, tuvo que encomendar su alma a Dios en una última oración al intuir con acierto que de inmediato tendría que abandonar su cuerpo ya inservible. Pero aún le quedó tiempo para hacer, con toda la belleza de que fue capaz su arte, una anotación EN LA ÚLTIMA PAGINA DE AQUEL LIBRO QUE PARA ÉL YA NO ERA NINGÚN ENIGMA, en la que todos pudieron leer como único texto:

"Señor, nunca encontré en mi, ningún mérito digno de Ti."
FIN
"Y esto es todo lo que para mi salvación puedo ofrecerte"

domingo, 9 de enero de 2011

CREEMOS QUE VIVIMOS NUESTRA VIDA

Iba bien abrigado. Llevaba un calzado fuerte y cómodo. La suela de mis botas era gruesa, dura y elástica, permitiendome andar y correr con mis piés abrigados y recogidos sin que los chinarros dañasen mis plantas.

Aunque era la primera hora después del alba y estaba muy próximo el final del otoño, no hacía frio, pero una brisilla incipiente que mantenía muy fresca mi naríz y mis orejas, me hacía temer que el tiempo, poco a poco, iría empeorando.

Me llegaba el olor de las pacas de paja y de alfalfa recien abiertas y escuchaba el ruido de las bestias al cortar, mascar y engullir, casi al unísono, los alimentos que sus amos habian distribuido por los comederos, estando impregnado el ambiente del olor del estiercol defecado por los animales, mezclado curiosamente, con el de los alimentos curados al sol que ahora engullían.

A intervalos, al pasar por las bodegas, también llegaba el perfume de los viejos toneles, continentes de reservas antiquísimas, así como los de los vinos más recientes y los de la cosecha, como aquel que dice, casi recién fermentados.

Valía la pena vivir el otoño para poder aspirar el aroma finísimo y penetrante de los membrillos. Se olía en los huertos, pero especialmente en nuestras casas, emanando de aquellos fruteros de arcilla horneada pintados a mano que repletos de membrillos recién cogidos distribuíamos por las alacenas.

También los alojábamos en bolsas de lino para que perfumaran los armarios, disponiéndolos de forma que su aroma llegase a nuestras ropas de vestir y también a las que vestían nuestras camas, para que al entrar en ellas pareciera que entráramos en el cielo.

Absorto y complacido en estas meditaciones dictadas por el testimonio de mis sentidos a lo largo de todo el recorrido, llegué a la casa de Rafael, mi amigo, después de haberme cruzado prácticamente toda la aldea en un plis plas.

Rafael estaba indispuesto, pero yo ya me había hecho el ánimo de salir y decidí perderme sin él por mis andurriales, contando con la compañía de mi garrote que me ayudaría calladamente a soportar mi peso, de igual modo que mis gafas y mi sombrero harían mas tenue la intensa luz y los rigores del sol, que durante el veranito de los membrillos creo que es la época del año que, aunque haga frío, el sol mas pica y calienta, especialmente si se ceba sobre una cabeza desnuda, con una calva tan amplia como la mía. Otro de los motivos que me empujaba a no desistir de lo que intuía que iba a ser una interesante aventura era la mochila que colgaba de mi espalda, que la sabia llena de abundantes víveres, todos ellos de mi agrado, así como saberla bien provista de los útiles que presumiblemente pudiera necesitar para cualquier emergencia.

Como el programa de ruta para aquel día lo había elegido Rafael en su parte primordial, decidí dedicarme a visitar algunas cárcavas y recovecos que no tenía bien explorados a pesar de que había pasado muy cerca de ellos con relativa frecuencia. Posponiendo la excursión programada por Rafael, para cuando mi amigo se sintiera en plena forma.

Desviado de mis rutas habituales exploré algunas sombrías cañadas que a pesar de encontrarse el sol en todo lo alto llegaron a intimidarme por la oscuridad que había bajo su fronda casi impenetrable y profundo silencio que las envolvía, haciéndose mas y mas temibles conforme se acercaban a la cárcava, donde los bancales se distribuían en forma de anfiteatro manteniendo sus ribazos intactos, y aunque sus albares conservaban toda su poblada vegetación, esta no era mas que una fantasmagórica visión en la que los gigantescos almendros ennegrecidos, completamente secos, extendían sus ramas como si fueran los brazos de descomunales gigantes que con toda su parafernalia se preparaban para lo que sin duda iba a ser una cruenta batalla.

No había una muestra de verdor en todo aquel semicírculo ni en sus alrededores, y su suelo estaba blando, como si acabaran de labrarlo, a pesar de que el aladro no había pasado por allí en decenas de años. Además estaba recorrido por huellas de serpientes tan abundantes y tan frescas que, conociendo como había conocido en otros lugares menos propicios ejemplares de casi tres metros y tan gruesas como mi pierna, no dudo que las que allí hubieran duplicasen esa envergadura, por lo que salí corriendo con tal velocidad y desasosiego que cuando ya estaba exhausto y me creí a salvo mas que caer, me eché en el suelo, boca arriba , contemplando como sobre mi volaban los cernícalos y algún que otro abejaruco.

Junto al terreno donde me eché, había una pequeña pendiente de tierra arcillosa en la que si se miraba con atención podían apreciarse algunas protuberancias en el suelo y por precaución, con una varita exploré la zona y me dí cuenta de que cada una de aquellas ondulaciones no era mas que una tapadera idéntica a la escotilla de un submarino, articulada por un tejido que parecía ser de tela de araña. Efectivamente así lo era, ya que cuando rocé la varita suavemente alrededor de una de aquellas escotillas, salio un arácnido bastante diferente a los que conocemos, con un tamaño algo menor que el de una tarántula de campo, el cual al percatarse de que el intruso al que había mordido, en este caso mi varita, era incomestible, aflojó los quelíceros y volvió a sumergirse en aquel tubo forrado por aquel tejido suavisimo, me imagino que esperando que el siguiente bichejo que por allí deambulara fuese un sabroso bocado al que poder llevar a su barriga.

Salido de aquel lugar pero aún en sus proximidades, pude ver en una planicie los restos de lo que fue una casa. No era muy grande. Los aseos y los corrales estaban fuera de su perímetro pero no se alejaban demasiado. También había un aljibe anexo a la casa que recogía las aguas de lluvia, pero cuando lo exploré estaba totalmente seco.

Siempre se despierta en mi una especial emoción cuando entro en una casa deshabitada, porque me da la sensación de que voy a sentir, en el ambiente, la presencia de aquellos que la habitaron que estoy seguro que me recibirán con afecto porque verán en mi el respeto y la cariñosa emoción que me mueve hacia ellos. Imaginando quienes eran, como vivían, incluso pensando que me van a mostrar, por tratarse de mi, los secretos que tan celosamente han venido ocultando por muchísimos años.

Poco había que ver en aquella casa que no era mas que una ruina. Por eso me quedé completamente maravillado cuando en una de las pocas paredes que se conservaban, protegida de la intemperie por un trozo de techo que todavía no había sucumbido, aparecieron ante mis ojos unos dibujos hechos a lápiz, que la mano que los trazó, fuese cual fuese su edad, era la de un verdadero artista. Eran estampas taurinas con un derroche de detalles impresionantes, pero lo que ponía los pelos de punta era el movimiento que había en cada una de sus figuras y en su conjunto, siendo todo tan armónico que resultaba increíble que aquellos dibujos pudiesen estar en la pared de una ruina, teniendo que estar en la mejor sala de un museo.

Había tres escenas sublimes: un Rejoneador haciendo un esquivo a un toro; el mismo Rejoneador saludando al tendido y un Torero entrando a matar.

Nunca he tendido a magnificar lo que cuento, hasta el punto que a veces por la humildad de los hechos relatados cual ocurrieron puede que para algunos pierdan interés al no valorar otras circunstancias, por eso, si aquí os digo que quien pintó aquello era un artista, es porque lo era y os puedo asegurar que si hubiese podido llevarme la pared me la habría llevado.

De regreso pasaron mil cosas por mi cabeza, pero la que más me inquietó fue que si mi amigo Rafael no hubiese estado indispuesto yo quizás jamás hubiese pisado esos parajes y lo que vi jamás lo hubiese descubierto.

Ello implica que en este caso el incidente marcó el acierto, pero en otras ocasiones, "nuestras vidas están llenas de vacíos que corresponden a los logros que nunca pudimos alcanzar, al no acertar qué hacer con nuestro tiempo, dejándonos llevar por la rutina."